Costa Rica, Colombia, EEUU y Panamá acuerdan trato directo al tema migratorio

La existencia de una crisis migratoria a nivel regional fue reconocida como el principal resultado de la reunión celebrada este martes, en la Cancillería panameña, con representantes de las direcciones de Migración de Costa Rica, Colombia, Panamá, y una representación de los Estados Unidos.

La directora encargada del Servicio Nacional de Migración, María Isabel Saravia, destacó que se lograron establecer siete puntos, sobre los cuales se establecerá la hoja de ruta para la segunda reunión entre los representantes de los cuatro países involucrados en la situación.

Saravia precisó que los siete puntos sobre los cuales se tratará la próxima reunión, pactada para el próximo 9 de noviembre, tienen que ver con acuerdos ya suscritos sobre el tema migratorio, principalmente relacionados con el combate al tráfico ilícito de migrantes, la lucha contra la trata de personas, entre otros puntos.

"Fueron evaluadas varias propuestas en esta reunión, lo más importante es que los Estados presentes estuvieron de acuerdo en el establecimiento de rutas, seguras y formales, que ayuden a combatir el tráfico ilícito de migrantes, la trata de personas y, sobretodo, salvaguardar la seguridad de las personas migrantes", aseguró la subdirectora de Migración.

Otros de los puntos que servirán de base para la reunión del próximo 9 de noviembre fue la creación de un observatorio de movilidad humana, a fin de obtener información sobre el movimiento migratorio irregular; de igual forma, plantea solicitar a la Organización Internacional para las Migraciones que efectué un análisis actualizado de los programas para migrantes en la región, para identificar oportunidades laborales para personas en esta condición.

En el pasado, estos países ya han sostenido reuniones con el objetivo de buscar rutas seguras, y mejorar los controles de entrada y salida de migrantes a través de sus fronteras, pero hasta el momento la situación no ha mejorado.

Por el contrario, empeoró desde el pasado 18 de octubre cuando el país norteamericano, destino de los miles de migrantes que atraviesan la selva de Darién, decidiera cerrar su frontera con México, exigiendo que los venezolanos ingresen de forma legal por aeropuerto y que cuenten con una especie de padrino o representante legal en el país.

Esto ha provocado que miles de venezolanos que abandonaron su país en busca del sueño americano quedaran varados en varios países de América Central, entre ellos Panamá, Colombia y Costa Rica.

La reunión fue solicitada por la Cancillería de Panamá en días pasados.

La subdirectora de Migración, María Isabel Saravia, indicó esta mañana en Noticias AM que lo que se busca es que todos los Estados asuman su responsabilidad con los migrantes que están dentro de sus territorios, respetando los acuerdos internacionales en materia de Derechos Humanos.