'Oscurantismo y falta de transparencia', fallas en la prórroga del contrato a Panama Ports
Panama Ports
La falta de información y cuestionamientos sigue siendo la gran falla tras el contrato de prórroga de la concesión por parte del Estado a Panama Ports Company (PPC), así lo destacó el ingeniero industrial, Tomas Paredes.
Paredes, dijo en el programa radial “Mesa de Periodistas”, que no se conoce el informe de auditoría de la Contraloría, el proceso de negociación, quiénes han sido los negociadores y sobre qué base se negoció.
Para el ingeniero, preocupa algunos rasgos de este contrato, uno de ellos el “oscurantismo que ha preñado todo el proceso”, además del secretismo y la falta de transparencia que no han sido positivos.
Otro de los casos que subraya, es la defensa a la que se ha recurrido para justificar este proceso de negociación, en este sentido, el tema de la seguridad jurídica un concepto que, a juicio del ingeniero se ha querido “santificar más allá de lo normal”.
En un artículo publicado recientemente en un diario de la localidad, Paredes destacó que el contrato existente permite las modificaciones a los términos y condiciones, en una de sus clausulas, estipula que, si hay un acuerdo entre las partes los términos y las condiciones pactadas en un inicio pueden ser modificadas, cosa que fue desechada por el gobierno para aferrarse a mantener las condiciones existentes.
Falta de respuestas de las autoridades
Sobre los voceros que han enviado, tanto el gobierno, como la empresa a dar explicaciones y a esclarecer la situación, manifestó que han sido personas que no conocen, ni participado en este proceso y defienden una cosa que a todas luces es indefendible.
En el caso de la auditoria presentada por Contraloría, sostuvo que el contralor, Gerardo Solís salió a vender “con bombos y platillos” un resultado que todavía nadie conoce para manifestar que Panama Ports había cumplido con las obligaciones del contrato.
Para Paredes, el gobierno subestimó la reacción de indignación que iba a causar esta renovación de contrato, tampoco tuvo el cuidado necesario.
Cláusulas del contrato original
Explicó que el contrato original le dada a PPC las áreas de concesión en los puertos de Balboa y Cristóbal y definía unas áreas futuras, entre ellas: Corozal, Rodman e isla Telfers.
En Rodman rechazaron porque era a tres años, y seguramente ejercieron la opción de isla Telfers, al encontrar una vía por parte del gobierno, para realquilar.
Continúo señalando que, para Balboa y Cristóbal, el objeto de la concesión era el desarrollo, operación, construcción y administración de puertos, pero en ningún momento dijo alquiler de tierras para actividades que no fueran las establecidas en el contrato.
Además, el contrato limitaba la concesión al manejo de carga general de contenedores, de carga a granel, pasajeros y automóviles.
Los montos que PPC genera por el alquiler de estas tierras, según Paredes, debe conocerlo el representante del gobierno en la junta directiva de esta empresa.
“Hemos tenido varios representantes el gobierno en esta junta directiva y de manera feliz y rampante han permitido que esta empresa haga lo que le da la gana”, dijo.
El ingeniero consideró que es falso aquello de que una vez PPC cumpla los 25 años de concesión, los bienes pasarán a ser parte de la República de Panamá, lo único que pasará a manos panameñas son las obras civiles que no se pueden llevar, todo lo demás que se pueda desmontar está en las ruedas; adicionalmente se corre el riesgo que dejen equipos totalmente inoperantes y obsoletos.
Por último, no consideró prudente, ni lo más conveniente que este tema sea enviado a la Asamblea Nacional para su revisión.