Ley que involucra áreas de Colón como patrimonio se hizo sin ningún tipo de visión, según dirigente
Patrimonio de Colón
Una falta de consulta de parte de las autoridades es lo que a juicio del dirigente colonense y secretario general del Movimiento Otro Camino, Diógenes Galván, ocurrió con la demolición de un viejo inmueble perteneciente al complejo de patrimonio histórico de la provincia de Colón.
Decisiones como esta de destruir un inmueble catalogado como monumento histórico, es grave y destruye el enfoque que se debe tener como ciudadano al respeto de las leyes y normas, enfatizó Galván en el programa Mesa de Periodistas.
Para el dirigente, son las autoridades las primeras que tienen que hacer valer las normas.
"La acción que ocurrió ayer, fue sin ningún tipo de plan o posiblemente con un plan que no se conoce, de tumbarlo para hacer algo después", dijo.
Recordó que hace muchos años en la Asamblea, se decidió incorporar casi todo el casco antiguo de esta ciudad, para evitar y controlar la venta del área de la Zona Libre y el estadio Mariano Bula.
Esto, según Galván, se hizo sin ningún tipo de estudio o análisis, pensamiento lógico, plan de urbanismo o de visión.
Este tipo de decisiones, hoy los tiene "amarrados", manifiesta Galván y no hay realmente un valor histórico en todos los inmuebles que están dentro de esta ley de patrimonio histórico.
Lo que realmente habría que hacer, es un cuestionamiento sobre cuál es el tipo de casco que quieren tener, si un Casco antiguo como el de la ciudad de Panamá y si ello realmente funcionaría en Colón o una ciudad moderna, enfatizó.
"Hay que pensar en las nuevas generaciones y preguntarles cómo quieren vivir, de esto se trata el construir una sociedad", destacó Galván.
Sobre el proyecto de renovación iniciado por el expresidente, Juan Carlos Varela, indicó: "Él estaba haciendo un proyecto muy personal, en donde se sintiera bien, no creo que lo hizo con una mala intención… era un tema de ego, él quería brillar y siempre se busca el lugar más oscuro para brillar y Colón era el más oscuro en esos momentos en el país".
Según el dirigente, no todo fue malo y rescató algunos sitios como el paseo marino, pero fue un proyecto muy parecido a lo ocurrido en una ciudad de Nueva Orleans, donde se movilizó a los residentes de este sitio a una nueva ciudad y desarrollaron la anterior para el turismo, un proyecto completo.
Sin embargo, en Colón esto se hizo "corriendo, a la carrera y no se tuvo cuidado con la gente en el proceso de implementación o ejecución del proyecto y no hubo una ley que le diera continuidad a lo que se venía haciendo".
Mientras, dijo Galván, al actual gobierno no le importa Colón y es un insulto que un presidente diga que vendrá con brochas a pintar 60 edificios.