Genisa pide se reinicie el llenado del embalse en Barro Blanco
Generadora del Istmo, S.A. (Genisa) solicita al Gobierno Nacional que se reinicie el llenado del embalse y finalización del proyecto hidroeléctrico Barro Blanco, culminado al 99%, debido a que “atenta contra la seguridad jurídica en el país”.
La empresa informó, a través de un comunicado, que dejar las obras inconclusas puede incurrir en “enormes riesgos” para las comunidades aledañas, que aumentan con el inicio de la época lluviosa en que se dan crecidas repentinas del río Tabasará.
Algunas de las consecuencias que menciona Genisa son:
- Inundación de viviendas o estructuras que se ubiquen aguas arribas y aguas abajo de la presa, que podría causar la pérdida de vidas humanas.
- Daños irreversibles en la infraestructura del proyecto y las zonas cercanas producto de un fallo o rotura de los diques de la presa.
Según Genisa, el proyecto ha sufrido "consecuencias negativas causadas por una suspensión unilateral del Gobierno en el 2015, por razones no justificadas".
“Estos riesgos reales son el producto de que se le impide a Genisa terminar el llenado del embalse de forma controlada, conforme al diseño del proyecto y al Plan de Llenado presentado y aprobado por las autoridades del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente), el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) y la Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP)”, señala la empresa en el comunicado.
De igual forma, Genisa plantea que el Gobierno Nacional debe asumir las “consecuencias legales, sociales y ambientales” que estén asociadas con un desastre natural, como los descritos por la empresa.
"Es necesario que el Gobierno tome decisiones amparados en el Estado de Derecho y en la seguridad jurídica del país", señaló Genisa.
“Exhortamos al Gobierno a que autorice la reanudación del proceso de llenado, pruebas finales y operación comercial del Proyecto, evitando las posibles consecuencias mencionadas y cumpliendo con los Contratos establecidos entre la empresa y el Estado”, agregó.
El proyecto hidroeléctrico Barro Blanco fue concesionado por el Gobierno en el año 2007 y espera generar energía suficiente "para iluminar 50 mil hogares de familias panameñas".
