Fitch Ratings se refiere a los retos que enfrentará la administración Mulino en materia fiscal
José Raúl Mulino
La calificadora de riesgo Fitch Raiting, que el pasado mes de abril redujo la calificación de Panamá a BB+', se refirió a los retos en materia fiscal que asumirá el presidente electo José Raúl Mulino.
De acuerdo con la calificadora, el presidente electo de Panamá, “enfrenta un camino difícil para abordar los desafíos fiscales e institucionales que contribuyeron a la rebaja de la calificación soberana del país por parte de Fitch Ratings a 'BB+'/Estable desde 'BBB-'/Negativa en marzo, dice Fitch. en un nuevo informe”.
La herencia de Mulino
Según la calificador, Mulino, quien asumirá el cargo el 1 de julio, heredará una posición fiscal débil, un déficit creciente en uno de los subsistemas de pensiones, incertidumbres persistentes en torno a la mina de cobre, problemas de suministro de agua que afectan al Canal de Panamá, un mercado laboral débil y un descontento popular latente después de años de protestas.
Mulino se comprometió a abordar estos problemas, pero aún no ha mostrado detalles sobre sus planes para hacerlo. El tenso contexto social, la legislatura fragmentada y los compromisos políticos pueden limitar su capacidad para lograr mejoras rápidas"
En un comunicado oficial Fitch Raiting, recalcó que el marcado deterioro en el perfil fiscal del país en los últimos 5 años y de la gobernanza, están entre los factores de peso que impulsaron su rebaja de marzo.
"El espacio fiscal limitado representa una vulnerabilidad particular para Panamá dada la dolarización y la fuerte dependencia de financiamiento externo, lo que restringe su capacidad para gestionar futuros impactos", remarcó el ente calificativo financiero.
Continúan diciendo que las ambiciones fiscales del presidente electo deberían volverse más claras este año, ya que el presupuesto de 2025 y un plan estratégico quinquenal deben presentarse antes de fin de año.
Para Fitch Raiting, reconstruir el espacio fiscal probablemente requerirá reformas legislativas difíciles que han eludido administraciones anteriores. El deterioro en la gobernanza fue otro factor que contribuyó a nuestra rebaja, y consideramos que los eventos problemáticos en torno al cierre de la mina Minera Panamá son una manifestación de esto en lugar de una anomalía.
"Mulino ha prometido una reforma constitucional y otros esfuerzos para mejorar la gobernanza, pero esto podría ser desafiante. El camino para reabrir Minera Panamá es complicado, en medio de una sensibilidad social aún elevada y casos de arbitraje pendientes".