Excanciller secuestrado por las FARC defiende el triunfo del 'No' en Colombia
Haber sido secuestrado por las FARC y permanecer bajo su custodia durante seis años, le bastan al excanciller colombiano Fernando Araujo, para justificar las razones del “no”, que resultó ganador en el plebiscito colombiano de este domingo 2 de octubre.
Utilizó la consigna “paz sí, pero no así”, para aclarar que Colombia sí quiere que llegue la paz definitiva, pero no de la forma en que ha sido acordada por las actuales autoridades con los dirigentes de las FARC.
Dijo que todos quieren que cese la violencia en Colombia, pero de igual manera anhelan que se respete la democracia, que se ve en peligro con el acuerdo de paz que se firmó recientemente.
Destacó que tuvo la oportunidad de conocer el método de adoctrinamiento y la filosofía de la guerrilla, que se basa en la corriente marxista de que el fin justifica los medios y se han inspirado siempre en la combinación de todas las formas de lucha.
Agrega que como fueron derrotados militarmente en Colombia, ahora intentan mediante la vía política, llegar al poder.
Aunque lo anterior no es un problema, porque podría llegar a ser algo lícito, destaca Araujo, lo que no cae bien es que “lo quieren hacer a través de prebenda y de la mayor impunidad nunca antes vista, después de haber cometido toda clase de crímenes atroces y de lesa humanidad”.
El tema de justicia sería determinante y según el acuerdo no se pagaría ni un solo día de cárcel y esto ha generado el rechazo de los colombianos.
Creen correcto que haya amnistía para los guerrilleros rasos, que se le pueda endilgar el crimen de rebelión, pero no para aquellos que cometieron asesinatos, atentados contra la población civil, entre otros.
En el tema tiene dos visiones que se complementan: mirar hacia el pasado y ver los temas de impunidad, perdón y miedo frente al accionar de la guerrilla y de que se puedan repetir los capítulos de terror.
La otra visión sería la de ir hacia adelante y ver el futuro del país y la consideración de la mayoría de los que votaron por el no es el hecho de que no se construiría una democracia fuerte.
Destacó que se tienen que dejar de lado las rencillas personales, con el tema e instó a la construcción de un acuerdo que sea verdaderamente positivo para Colombia.
Lo que sigue
Araujo dijo que es un panorama difícil de entender, ya que la negociación la lidera el presidente Juan Manuel Santos, pero ve dos caminos.
Explica que el primero sería establecer algunas condiciones básicas para que no haya violencia en Colombia, mientras que el segundo considera que podría ser aplazar la negociación del acuerdo, para el próximo presidente que deberá ser escogido dentro de dos años.