Escultura de azúcar honra a obreros negros
Una escultura de casi 11 metros (35 pies) de altura al estilo de una esfinge elaborada con azúcar se exhibe en una antigua fábrica de la ciudad de Nueva York como un homenaje a los trabajadores negros.
La monumental instalación de la artista Kara Walker ocupa gran parte del cavernoso interior del lugar donde estaba situada la Refinería de Azúcar Dominó, en la sección de Williamsburg en Brooklyn.
La artista utilizó cuatro toneladas de azúcar para crear la escultura de exagerados rasgos africanos, que usa un pañuelo en la cabeza.
La artista es conocida por la exploración de asuntos raciales, discriminación, explotación sexual y el poder en su obra.
El título completo de la obra es "Una sutileza o La maravillosa bebé de azúcar, un homenaje a los artesanos no asalariados y agobiados que han refinado nuestro gusto dulce desde los cañaverales hasta las cocinas del Nuevo Mundo con ocasión de la demolición de la Planta de Refinamiento de Azúcar Dominó".