Entra en vigor en Panamá una ley que pena con cárcel maltrato al adulto mayor
A partir de este viernes el maltrato físico o psicológico a los adultos mayores en Panamá se castigará con penas de entre 3 y 6 años de prisión, gracias a la entrada en vigor de la Ley 149 sobre la protección integral de los derechos de esta población.
En la legislación se considera maltrato a un adulto mayor el "causar, permitir o hacer que se le cause daño físico, mental o emocional, incluyendo lesiones físicas causadas por castigos corporales".
También que se le utilice o induzca a la medicidad o en empleos que pongan en riesgo su vida, darle un trato negligente o mala alimentación, no llevarlo al médico cuando lo requiera, o emplearlo en labores domésticas que no sean apropiadas a su condición de adulto mayor.
El que incurra en maltrato al adulto mayor deberá pagar entre 3 y 5 años de prisión, una sanción que se elevará a entre 4 y 6 años cuando el perpetrador sea un familiar, el cónyuge o el encargado del cuidado de la persona de la tercera edad, entre otros.
La entrada en vigor de esta ley "es una buena noticia", dijo a Efe el experto constitucionalista Ernesto Cedeño, que recordó que esta misma semana un anciano fue abandonado a las puertas de un hospital por su familia, que no lo quería porque supuestamente tenía coronavirus.
"Ahora, con esta ley, la persona responsable (de abandonar al anciano) va a prisión por negligencia, por mínimo de 3 años", dijo Cedeño, que afirmó que en Panamá "son hechos públicos y notorios que tienen a muchos abuelos cuidando nietos y no porque ellos lo desean".
La Ley 149 también modifica artículos de la Ley 36 de 2016, estableciendo ahora que los adultos mayores podrán optar a becas nacionales e internacionales conforme a los requisitos que ofrezca la plaza, entre otros.
La Ley 36 de 2016 declaró el 1 de octubre de cada año como Día del Adulto Mayor.
Según estimaciones del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC) de 2019, la población de adultos mayores de Panamá alcanzaba los 517.488 personas, es decir, el 12 % de los habitantes de este país centroamericano.