Recomendaciones para una lonchera saludable
Iniciar la mañana sin desayunar, es quitarle energía valiosa al cuerpo. Y si a ello, le sumamos la incorporación de alimentos poco saludables a la lonchera de nuestros hijos, el resultado será bajo rendimiento escolar.
Fanny Cardoze, especialista en atención nutricional y dietética a pacientes con diferentes patologías, así como asesora nutricional de la Selección Panameña de Futbol (Femenina-Masculina) y atletas de alto rendimiento, hizo una serie de recomendaciones a los padres de familia para que cuiden la salud de sus hijos en este regreso a clases.
Según Cardoze, no se debe iniciar la mañana sin un buen desayuno, aunque existen niños, niñas y adolescentes que prefieren evitarlo porque les causa molestia. Sin embargo, se debe hacer el esfuerzo para que puedan arrancar el día con nutrientes.
¿Cómo preparo adecuadamente la lonchera de mi hijo (a)?
Cardoze explica que es muy importante:
- Colocar frutas frescas en la lonchera: el primer recreo inicia a las 9:00 a.m., es ahí donde los estudiantes deben comer las frutas porque aún conservan el valor nutricional, por lo que pueden colocarles sandía, piña, guineo, manzanas, peras, melón, uvas, entre otras.
- Evitar jugos artificiales, porque tienen más de 25 gramos de azúcar por porción, lo que crea hiperactividad por el exceso de azucares, produciendo la falta de atención en los estudios.
- Los lácteos siempre son perfectos, existen yogurt líquidos que gustan mucho a los estudiantes.
- Llevar emparedados saludables con embutidos bajos en grasa (no salami, ni peperoni)
- Procurar variedad en las meriendas, para que la monotonía no los aburra y regresen a casa la comida. Opciones podrían ser: galletas con mermelada y mantequilla de maní.
- El agua no puede faltar y la cantidad va ser proporcional a la edad del estudiante. Sin embargo, como una escala promedia por lo menos deben tomarse dos botellitas de agua (800 mililitros aproximadamente).
Hay niños que solo toman agua de la fuente y es ahí donde vienen las infecciones renales, por la falta de agua.
- El consumo de papitas y galletas dulces, se pueden realizar siempre y cuando estén controlados, es decir, que no sea el común denominador en las loncheras.
- La alta ingesta de frituras no deben existir en las comidas, ya que eso promueve la obesidad infantil.
Según detalló Cardoze, la obesidad infantil está incrementándose, afectando la salud en todos los estratos sociales. “En nuestra población existe como un 50% de sobre peso u obesidad en los niños, lo que es realmente alto”.
Los padres deben planificarse y darles los mejores nutrientes a sus hijos, aunque conlleve más trabajo.
Es preocupante como hay niños que les dan dinero para comprar en las escuelas y si sus jornadas son extensas, uno o dos dólares, no les va a alcanzar para que tengan reales nutrientes y tampoco el bolsillo de los padres aguantará. Por lo que recomiendo que lo que se prepare en casa, el niño pueda llevarlo a la escuela, ya que es más económico y nutritivo, concluyó la asesora nutricional.