La educación sexual sigue siendo una deuda en la sociedad panameña
Ante la falta de un plan integral sobre la enseñanza de la educación sexual en Panamá, las cifras de embarazo en el país son alarmantes. Tan solo el 86% de las menores embarazadas reconocen que el padre del bebé es un adulto y en la actualidad hay 16 mil 470 personas que viven con Sida de las cuales el 23% están entre la edad de 15 y 24 años.
La ley de educación sexual que aún no ve la luz en la Asamblea Nacional establece que la enseñanza de la educación sexual debe ser aplicada en el ámbito nacional en todos los establecimientos de educación básica general, media y universitaria, oficiales y particulares; así como en todos los establecimientos de la red pública de salud, incluyendo a la Caja del Seguro Social y las organizaciones gubernamentales, no gubernamentales y particulares que prestan servicios de salud.
En las escuelas públicas se sigue sin enseñar educación sexual, en el sector privado se apuesta por modelos educativos integrales.
En el colegio Pureza de María se aplica un modelo chileno, al que denominan educación para el amor, también usado en España y los países del África subsahariana, la región con mayor índice de embarazos adolescentes a nivel mundial.
Las estadísticas demuestran que a mayor pobreza menor información de los jóvenes sobre la salud sexual y reproductiva.
Para 2012 se reportaron 3,473 casos de infecciones, 334 casos de niñas y adolescentes entre 10 y 19 años y en 2010 se reportaron 154 casos de gonorrea en adolescentes varones de 15 a 19 años.
Casos que siguen en aumento y ante el cual el Estado panameño tiene una gran deuda para que nuestros jóvenes no sigan siendo presa de la ignorancia en cuanto a educación sexual se refiere.