Delincuentes se valen de información en redes sociales y las necesidades de las personas para estafar

Las denuncias por estafas y fraude han aumentado desde que se empezaron a reactivar las actividades económicas, tras el parón causado por la pandemia de la COVID-19, así lo ha afirmado el mayor de la Dirección de Investigación Judicial Domingo Gallardo, quien aseguró que las autoridades trabajan para dar con los malhechores.

Entre enero y mayo del 2022, se presentaron 2,064 denuncias por estafas, 134 por estafa agravada, 44 por manipulación de programas informáticos, 4 por cobro indebido de seguros, 3 por hipoteca sobre bien ajeno, y 1 por fraude de servicios públicos.

Gallardo explicó que, para que haya un delito de estafa debe existir el engaño de la persona que se vale de la ingenuidad de la ciudadanía para acceder al patrimonio económico, mientras que la estafa agravada debe pasar los 100 mil dólares y por medios electrónicos.

Destacó que la inocencia de las personas lleva a ceder el patrimonio económico a través de la modalidad de que se ganó un premio.

Recomendó a la ciudadanía no colocar información personal en redes sociales, decir donde está o detalles de la intimidad que puedan ser usados por los delincuentes. Agregó que estos estafadores también se valen de las necesidades de las personas para llevar acabo el delito.

Gallardo indicó que dentro de las investigaciones se ha determinado que son grupos delincuenciales, de personas fuera y dentro de las cárceles. Insistió en la importancia de que la ciudadanía haga las denuncias.

Además, sugirió que en caso de encontrarse en una situación en que es contactado para decirle que su familiar está secuestrado, mantener la calma, no quedarse callado y dar aviso a otros familiares, porque posiblemente esté ante una estafa.