Defensor del Pueblo llama 'peligrosa y vetusta' a figura del fiscal de defraudación

Ciudad de Panamá/Recientemente el gobierno nombró la figura del fiscal de defraudación, para algunos un funcionario con súper poderes en lo que respecta a la aplicación de las normas fiscales del país.

Ante ello, Eduardo Leblanc, defensor del Pueblo, ha levantado las alertas y ha solicitado al Ejecutivo que rinda una mayor explicación sobre esta figura, debido a que le preocupan algunas funciones que giran en torno al cargo como la decisión de allanamientos, requisas, capturas y cateos, y que quedarían en manos de una sola persona, lo que a su juicio es peligroso.

Por esta situación. Leblanc tiene pendiente una reunión con el director general de Ingresos, Publio De Gracia, ha enviado consultas al Colegio Nacional de Abogados, la Universidad de Panamá, Universidad Santa María La Antigua.

“Es más importante ahora mismo hablar con la academia y con el director de la DGI a ver si se modifica ese decreto vetusto, de hace más de 40 años (30 de enero de 1984), y saber si la recaudación se ha afectado porque comprendemos que hay muchos negocios informales que no están tributando y es necesario que lo hagan”, explicó.

A su juicio no se puede, después de 40 años, dejar a cargo de una persona que no se puede llamar fiscal, tanta fuerza.