Crisis migratoria: Entre el derecho a una vida digna y los peligros de la migración ilegal
Crisis Migratoria
Ciudad de Panamá, Panamá/El drama que atraviesan los migrantes no inicia cuando deciden abandonar sus países por rutas ilegales, sino desde antes, cuando sufren las violaciones a sus derechos o situaciones adversas en sus naciones que los obligan a salir de formas no tan correctas y dispuestos a enfrentar todo tipo de peligro en su camino hasta llegar a Estados Unidos.
Jorge Ayala, Pastoral de Movilidad Humana de la Iglesia católica, manifiesta que el principal objetivo de la organización es concientizar a las personas sobre la condición de estas personas, tratando de rescatar la dignidad de estas personas como seres humanos para crear empatía y promover la solidaridad.
Lamentó que estas personas, luego de haber sobrevivido a la selva de Darién hayan muerto en un accidente de tránsito, por lo que espera que el Estado dé acompañamiento a los sobrevivientes, de parte de ellos también tratarán de hacer lo propio, aunque aún no se tenga información sobre los mismos.
Ayala indicó que, a simple vista, los buses que trasladan a estas personas están en buenas condiciones, pero desconocen bajo qué condiciones se dan los contratos, cuál sería la capacidad de los buses o si cuentan con seguros colectivos, no obstante, esperan que, tras esta dura experiencia, las autoridades busquen la forma de garantizar la mayor seguridad posible.
Reconoció que, la Autoridad Nacional de Migración carece del personal para atender la crisis migratoria, sin embargo, espera que con lo sucedido se puedan buscar métodos para mejorar estas situaciones.
Recalcó que Panamá es de los pocos países que están haciendo “algo” para ayudar en la crisis migratoria, por lo que hay que darle oportunidad al Gobierno de explicar las situaciones establecidas en el informe de las Naciones Unidos donde se hacen denuncias de violaciones a los Derechos Humanos, lo que deja mal parado al país y a las organizaciones presentes.
Explicó que los migrantes que llegan a Darién sin recursos económicos pueden hacer trabajos comunitarios con los que se ganan el abordaje al bus para ser trasladado hasta Chiriquí.
Además, dijo que estas denuncias de violaciones deben saberse analizar, pues muchos dicen que no les dan alimentación, pero no es tan cierto, pues en las noches se hace un conteo de la cantidad de personas que hay, pero al amanecer hay más, entonces no es que se estén violando los derechos.
Ayala manifestó que, una vez los migrantes cruzan la selva, es imposible retornarlos, entonces, el compromiso como Estado es atenderlos y asegurar que su traslado hacia la siguiente frontera sea lo más fácil posible, recalcando que en toda la crisis migratoria es la primera vez que ocurre un accidente de esta magnitud.
Agregó que, es necesario reconocer que el problema nos está superando y solicitar ayuda, indicando que los gobiernos anteriores vieron este problema como algo temporal, y no se prepararon para lo que hoy día se está dando.
Concluyó diciendo que toda persona tiene derecho a tener una vida digna donde nace, pero si estos derechos son vulnerados, entonces, esa persona tiene derecho a migrar de ese lugar.