La controvertida carretera Corredor del Caribe sigue generando debate entre ambientalistas y desarrolladores turísticos
La Sala Tercera de lo contencioso administrativo ha suspendido provisionalmente dicha suspensión.
Hace aproximadamente seis meses, se presentó una demanda contra el proyecto de construcción del Corredor del Caribe, una carretera que abarca Quebrada Ancha y María Chiquita, en la provincia de Colón. Ambientalistas demandaron este proyecto debido a los daños ecológicos que implicaba, logrando la suspensión provisional del proyecto. Sin embargo, esta semana, la Sala Tercera de lo Contencioso Administrativo ha suspendido provisionalmente dicha suspensión.
El ambientalista Guido Berguido, expresó su consternación ante la decisión de la Corte Suprema de Justicia:
"Estamos consternados. Hace seis meses celebrábamos con júbilo que por primera vez veíamos cómo la Corte Suprema hacía valer la legislación actual en cuanto al ambiente, específicamente la ley 287 de febrero de 2022 que establece los derechos de la naturaleza. Ahora vemos un retroceso significativo”, indicó.
Te puede interesar: Corte levanta medida de suspensión provisional al proyecto Corredor del Caribe
El ambientalista subrayó que existen alternativas menos perjudiciales para el medio ambiente que no se exploraron adecuadamente. "La principal ruta alternativa que nos llamaba la atención es la existente de Sabanita hacia la costa arriba, que es un área con gran influjo de personas. Esta carretera realmente no beneficia a la mayor cantidad de personas en Puerto Pilón y las comunidades cercanas, y nos preocupa que no se estén considerando sus derechos ni los de la naturaleza", afirmó Berguido.
En este contexto, la licenciada Sonia Serracín presentó una demanda de nulidad ante la Corte Suprema, argumentando que el estudio de impacto ambiental del proyecto presenta irregularidades significativas. "El proyecto fue fraccionado y categorizado como de menor jerarquía, lo que no corresponde a su magnitud. Debería haberse considerado como categoría 3, que involucra una participación ciudadana más amplia y otros elementos importantes", señaló Berguido.
Por su parte, Cristóbal Valencia, representante de la Cámara de Turismo de Colón, ofreció una perspectiva diferente, defendiendo la necesidad del proyecto para el desarrollo de la región:
"Consideramos que este proyecto es un acto de justicia. No solo desde el punto de vista del desarrollo turístico, sino también para facilitar la vida de las comunidades. Esta carretera beneficiará a Portobelo, Costa Arriba y toda la región hasta Santa Isabel."
Valencia mencionó que la modificación de la entrada de la vía por Santa Rita Arriba reducirá el impacto ambiental y mejorará la conectividad de las comunidades, facilitando el acceso a servicios básicos como salud y educación. "Es una vía de esperanza y oportunidad, justa y merecida para esta región", añadió.
Además, Valencia destacó que la planificación del proyecto incluye medidas para mitigar el impacto ambiental y promover el desarrollo económico sostenible. "Estamos solicitando al gobierno central y a las diferentes entidades un esfuerzo grande por formar a la población para que cada pueblo tenga una personalidad propia y se integre en el turismo. Hay inversiones de toda magnitud en la región, y es esencial que la comunidad se beneficie de ellas", comentó.