Consideran que propuesta para modificar Ley de Jueces de Paz crea retrocesos
Jueces de paz
Hace algunos años (2002), la figura de los corregidores y jueces nocturnos, fue objeto de análisis por la Alianza Ciudadana Pro Justicia, y se detectó las debilidades de este sistema, entre las cuales estaban: el tema de la politización excesiva, recordó el abogado, Carlos Lee, miembro de la Alianza Ciudadana Pro Justicia.
Desde entonces, se empezó a hacer un proceso de consulta, para buscar la mejor forma de ofrecer el servicio de recomponer el tejido social.
Este proceso coincidió con el de la Ley de Descentralización y con la preparación del Órgano Judicial, al nuevo Sistema Penal Acusatorio, estos últimos plantearon la necesidad de atender el problema comunitario a través de jueces y juzgados que se suplirían a través de los juzgados municipales.
Fue así que se logró crear de entre estas tres propuestas una sola, que fue llevaba ante la Asamblea Nacional, por medio del Ejecutivo, pero una vez en este sitio se desvirtuó por intereses políticos de los diputados, con cambios que desnaturalizaron el principio de que los jueces de paz no tendrían poder para poder meter presos a nadie, ni actuar como litigantes sino como amigables componedores de la relación comunitaria.
Lee destacó que el apoyo político para la ejecución de la Ley 16, nunca se ha dado, tanto alcaldes como el Concejo Municipal como tal, nunca respaldaron dando recursos necesarios montar el sistema como estaba establecido, por sentir “que se les quitaba poder político y no iban a poder influir”.
Por otro lado, la ciudadanía como tal no tiene conciencia de qué se trata esta nueva forma de intervenir en los conflictos comunitarios. Las personas acuden ante los jueces de paz pensando que actuarán como lo hacían los corregidores y, cuando ven que esto no ocurre sienten frustración.
Igualmente, se mantuvo la politización de las designaciones a jueces de paz, porque, en la convocatoria pública que debió ser abierta para ello, solo fueron avisados los corregidores, por lo tanto, la mayoría de los jueces de paz designados “son antiguos corregidores que no cambiaron su mentalidad y no aprendieron a hace justicia de paz”.
Según el abogado, ninguna de las tres propuestas que han sido presentadas actualmente, para modificar la Ley 16, resuelven los problemas que tiene la norma y más bien crean retrocesos.