Clases seguirán suspendidas en Chiriquí, Veraguas y comarca Ngäbe Buglé

Las condiciones climáticas adversas que siguen azotando a la región occidental del país ha obligado al Ministerio de Educación a suspender las clases en todos los centros educativos de la provincia de Chiriquí como media de protección ante el aviso de advertencia emitido por el Instituto de Meteorología e Hidrología de Panamá en el que pronostican un incremento de lluvias durante las próximas horas. La medida también se extiende a la provincia de Veraguas y la comarca Ngäbe Buglé.

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La Dirección Regional de Educación de Chiriquí, en coordinación con la Ministra de Educación, la Gobernadora de la provincia y el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc), anunció la suspensión de clases en toda la provincia de Chiriquí para los días lunes 12 y martes 13 de noviembre. La decisión responde a las intensas lluvias que han afectado la región, provocando deslizamientos, inundaciones y una elevada saturación de los suelos, lo que ha puesto en riesgo a las comunidades y centros educativos.

Las autoridades indicaron que esta decisión busca garantizar la seguridad de los estudiantes y del personal educativo, y se evaluará la situación en los próximos días, esperando que las condiciones climatológicas mejoren. En las zonas donde sea seguro, el personal directivo y administrativo de las escuelas no afectadas tiene la recomendación de acudir a sus centros para realizar una revisión de los daños y presentar informes de estado a sus supervisores.

Para asegurar la continuidad del aprendizaje, el Meduca instó a los docentes a implementar estrategias virtuales de contacto con sus estudiantes, a través de plataformas como WhatsApp y módulos en línea, en aquellas áreas donde la conectividad y las condiciones lo permitan.

Así mismo, en las regiones de Nedrini y Kodri en la comarca Ngäbe Buglé, se han registrado crecidas de ríos y quebradas, saturación de suelos, graduales de tierra en las vías de comunicación, y deterioro de carreteras en varios puntos, lo que ha resultado en el cierre de algunas de estas. Estas condiciones climáticas actuales impiden el desarrollo normal de las labores educativas; por tanto, se mantiene la suspensión de clases en toda la región de la Comarca Ngäbe-Buglé para evitar desplazamientos y así preservar el bienestar de estudiantes, docentes y padres de familia.

En cuanto al área de Ñokribo, aunque no toda la región presenta lluvias intensas, se considera necesario mantener la medida de prevención debido a que las áreas montañosas y de cordillera registran lluvias persistentes, lo cual causa la crecida de ríos. Por ello, recomendamos evitar movilizarse, permanecer en lugares seguros y seguir todas las indicaciones de seguridad emitidas.

Según el último informe del Sistema Nacional de Protección Civil y el Cuerpo de Bomberos, en la provincia de Chiriquí son más de 1,000 personas damnificadas, de las cuales 577 se mantienen en albergues, se han inundado 159 viviendas y han sido afectadas por deslizamientos de tierras con pérdida total cuatro casas.

Las crecidas de los afluentes han provocado el colapso de un puente en Barú, más de medio centenar de deslizamientos de tierras y la obstrucción de algunos caminos que han sido gravemente afectados especialmente en las áreas de Tierras Bajas y Tierras Altas. Las personas afectadas están nueve albergues que han sido instalados en estas localidades y están siendo atendidos por funcionarios materia de asistencia social médica y psicológica.