Ciberterrorismo: Jóvenes consumen productos no adecuados en internet
Ciberterrorismo Panamá
Ciudad de Panamá, Panamá/La aprehensión de un adolescente de 14 años por ciberterrorismo, luego de que lanzara varias amenazas contra una escuela, ha encendido las alarmas en la sociedad sobre la exposición de los menores al internet, con quién se comunican y por qué adoptan este tipo de conductas que son una amenaza general.
Pero la discusión no solo se puede hacer desde el plano jurídico, también es importante entrar a analizar la psiquis de la persona, por qué inician estos comportamientos y qué está buscando con el mismo.
El psicólogo clínico Cristóbal Nieto, calificó de complicada la situación, asegurando que lo primero que hay que pasar a verificar es la presencia del padre en la vida del menor, debido a que actualmente se vive en una sociedad desconectada, con padres ausentes que están es por ver cómo llevan el sustento a la casa o tienen otro estilo de vida y no están pendientes de sus hijos.
Aseveró que, no filtrar el contenido de lo que ve y hace en internet es parte del problema, ya que pasan demasiado tiempo en las consolas o consumiendo productos no aptos para menores.
“Ese tipo de comportamiento que está viendo en redes sociales es lo que quiere imitar, por eso la idea es que el padre supervise y tenga la capacidad de saber qué es lo que hace su hijo, así sea adolescente”, indicó.
Detalló que existen señales para detectar que un joven está atravesando algún tipo de problema o adquiriendo comportamientos inadecuados como: conductas agresivas, poca comunicación, poca empatía y la introversión.
“Una persona que comete un acto delictivo, es tanto victimario como víctima, porque usualmente, cuando una persona tiene comportamiento de tipo disocial, usualmente viene con dificultades desde hace mucho tiempo, conflictos emocionales no resueltos, que al final terminan ejecutándolo, ya sea hacia uno mismo o hacia la sociedad”, manifestó Nieto.
El psicólogo recalcó que los adolescentes quieren imitar lo que ve en redes sociales, lo ven de manera exaltada, como si fuera algo bueno, sin la capacidad de discernir si está bien o mal, porque el contenido simplemente llega y lo quiere imitar.
Resaltó la importancia de que los padres estén pendientes de lo que su hijo está consumiendo, está haciendo, quiénes son sus amigos, cuáles son sus gustos, cómo expresa sus emociones. Entonces, la idea es que el padre aprenda a poner límites que no son prohibiciones, sino una protección.
“La idea es que la familia esté conectada con lo que los hijos hacen. La idea de que los críe la consola, los críe el internet no es bueno porque tendremos adultos inestables”, aseveró.
Sostuvo que los adolescentes pueden llegar a pensar que todo lo que se ve en internet es bueno y hay contenido muy perjudicial.