Piden reforzar las fronteras para evitar ingreso de 'mareros' a Panamá

Asesinatos, secuestros, extorsiones y otros hechos delictivos, están cometiéndose más frecuentemente en el interior del país, sobre todo en la provincia de Chiriquí, donde el crimen organizado cada vez más va tomando terreno.

Para el comisionado retirado y abogado, Carlos Icaza, pudiera ser que la delincuencia común, tal vez está desapareciendo, dándole paso a acciones que se desarrollan con decisiones que se toman por una cúpula o una organización criminal.

“Esto es más grave que la delincuencia común, hoy día se calcula, se analizan y se programan actos delictivos, por ello la ansiedad en la ciudadanía, porque, son cosas que antes no ocurrían”, recalcó.

El narcotráfico es uno de los factores que puede influir para que se esté dando este tipo de hechos puntualmente en Chiriquí, sobre todo por ser una provincia fronteriza.

“Definitivamente, la provincia de Chiriquí es atractiva para el intercambio comercial de sustancias ilícitas”, enfatizó.

De acuerdo con Icaza, la formación de pandillas u organizaciones criminales en esta provincia data aproximadamente de 14 años a 15 atrás, y con el pasar del tiempo ha ido evolucionando, “sacando las garras y viendo las heridas que causa”.

En este sentido, la delincuencia común queda al servicio de estas grandes organizaciones criminales, que buscan asociar a jóvenes.

Plan de seguridad y riesgo de entrada de "mareros"

Sobre, el plan de seguridad que ya han anunciado las autoridades, el abogado resaltó que uno de los puntos a abordar sería el incremento del pie de fuerza.

Icaza se refirió a los hechos que se han dado en El Salvador y las acciones que mantiene el presidente Nayib Bukele, para los pandilleros o conocidos “mareros” y un posible riesgo de la entrada de estos individuos a Panamá.

Según el abogado, ya existen antecedentes de entrada de estos delincuentes al país y sus vínculos con organizaciones delincuenciales panameñas y “no es un secreto”; es por ello, que otra de las acciones a tomar debería ser fortalecer las fronteras para evitar su posible ingreso.

Precisó, que Panamá ha sido un “lindo atractivo, refugio de delincuentes de toda clase de delincuentes que entran y salen”.