Aprueban en tercer debate proyecto que agrega 6 nuevos corregimientos al territorio Ngäbe-Buglé

En tercer debate fue aprobado este jueves 20 de agosto, el proyecto de Ley 73, que crea 6 nuevos corregimientos en la comarca Ngäbe-Buglé.

La iniciativa impulsada por el diputado Leopoldo Archibold, surge en respuesta al clamor de las necesidades básicas de miles de residentes del circuito 12-1 de la comarca Ngäbe- Buglé y Campesinos.

Con la aprobación de esta iniciativa, el corregimientos Trinchera Comarcal, queda segregado del corregimiento Mününi, el área de Río Canoa, se segrega del corregimiento Piedra Roja.

Igualmente, en el distrito Kankintú; el corregimiento Beri, será segregado del corregimiento Tu Gwai, la región de Daira, se segregará del corregimiento Man Creek.

También, en el distrito de Jirondai, el corregimiento de Vegay, se segregará del corregimiento Río Chiriquí, Bucori, será segregado del corregimiento Bahía Azul, en el distrito de Kusapí.

A consideración de Archibold, con la nueva ley los moradores de estas zonas podrán mejorar su calidad de vida, integrándola a la vida económica y social, especialmente las comunidades de difícil acceso, donde hoy en día, sus habitantes tienen que caminar hasta 8 horas para poder atenderse en un centro de salud y en algunos otros lugares hasta 2 días.

En este anteproyecto se contemplan todas las disposiciones constitucionales y las leyes vigentes en materia sobre la comarca Ngäbe Buglé y Campesinos (Ley 10 de 1997) y protegen a demás todas las costumbres étnicas, culturales y lingüísticas de la región comarcal.

La propuesta en mención se fundamenta en el artículo 5 de la Constitución Política de la República de Panamá que señala: "El territorio del Estado Panameño se divide políticamente en provincias, ésta a su vez en distritos y corregimientos. La Ley podrá crear otras divisiones políticas, ya sea para sujetarlas a

regímenes especiales o por razones de conveniencia administrativa o de servicio público".

Adicionalmente, la creación de nuevos corregimientos promoverá el desarrollo educativo, cultural y económico convirtiéndolos en polos de desarrollo para el bienestar de la población, que viven en condiciones de pobreza y extrema pobreza, y le facilitaría al Estado panameño establecer cerca del ciudadano todos los servicios públicos.