Ana Matilde Gómez: Cuesta mucho no hacer interpretaciones políticas de las decisiones del procurador Caraballo
Gómez expresó que si bien el presidente Mulino no puede controlar lo que Martinelli quiera decir, sí puede advertir el daño que le hace por su cercanía.
Ciudad de Panamá/La exdiputada independiente, Ana Matilde Gómez, manifestó que cuesta mucho, en las circunstancias en que se da, seguir el llamado que ha hecho el procurador de la Nación, Javier Caraballo, a que no se hagan interpretaciones políticas sobre las decisiones que ha tomado.
Y es que, días antes de la toma de posesión del gobierno de José Raúl Mulino, se dio a conocer la destitución de los fiscales superiores, Zuleyka Moore y Adecio Mojica, quienes formaron parte del equipo que investigó el caso Odebrecht.
Un día después, el país se enteró de la renuncia del fiscal superior Aurelio Vásquez.
Para Gómez, esto no es casual y mucho menos que se dé en medio de mensajes emitidos por parte del exmandatario Ricardo Martinelli, el cual, desde su asilo en la Embajada de Nicaragua y previo a conocerse de los movimientos que se harían en el Ministerio Público, ya se hablaba de una supuesta lista de fiscales. Lo que, a su juicio es una evidente intromisión a la justicia.
Expresó que si bien el presidente Mulino no puede controlar lo que Martinelli quiera decir, sí puede advertir el daño que le hace por su cercanía.
Para la exprocuradora, la justicia sufre un golpe por el constante y continuo discurso, tanto de Mulino como de Ricardo Martinelli, al hablar sobre la eficacia de la misma a través de las sentencias o los fallos.
Gómez también tildó de desacertada la metáfora esbozada por Mulino, donde mencionó unas llaves que destrancarían unos candados, un supuesto periodo de odio y que en el tiempo que fue ministro hubo una presunta persecución política.
"Mulino tiene que desgranar bien para saber a qué personas les está hablando. Esas personas nos deben probar que fueron manipuladas, para que caigan los funcionarios, pero con una investigación que traiga como resultado eso, porque si no, lo único que se está transmitiendo es un temor, para que haya intimidación", expresó.
Por otra parte, dijo que es necesario que el procurador Caraballo comprenda la avidez de información que hay, porque hay muchos temas andando en los que el fiel de la balanza será el Ministerio Público, cuando se hagan las investigaciones.
"Vienen cosas delicadas, el tema de minería y el Darién, por lo que se necesita credibilidad", recalcó. Agregó que esa credibilidad es un endoso que dará la ciudadanía, sobre la base de no estar constantemente martillando la utilización del MP, para lo que el presidente quiere llamar persecución política.
Desde su percepción, el próximo procurador debe ser una figura que no siembre la duda inicial de que llega para hacer algún mandado y no trae esas llaves de las que ha hablado el presidente que va a entregar para que se actúe con libertad de conciencia y de acción.