Panamá, sede de la Jornada Mundial de la Juventud 2019

Tal como indicaban los pronósticos que mantuvieron al país en expectativa, el papa Francisco anunció este domingo 31 de julio, que Panamá será la sede de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) 2019.

Cumpliendo con la tradición, el pontífice hizo el anuncio ante miles de jóvenes que asistieron a la misa de clausura de la JMJ desde el Campo de la Misericordia, en Cracovia, Polonia.

De esta manera culmina la XXXI JMJ que se inició el pasado martes 26 de julio con el tema “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán la misericordia” (Mt 5,7).

"La próxima Jornada Mundial de la Juventud se realizará en Panamá", dijo Francisco al culminar la homilía a la que también asistió el presidente de Polonia Andrzej Duda, autoridades de este país europeo, el presidente de Panamá Juan Carlos Varela, la primera dama Lorena Castillo de Varela, la vicepresidenta y canciller Isabel de Saint Malo de Alvarado y autoridades religiosas.

La alegría se hizo sentir en el Campo de la Misericordia con gritos y aplausos tras el importante anuncio.

La JMJ es un legado del papa san Juan Pablo II, que empezó con una invitación para que los jóvenes se reunieran en Roma en 1984, durante la celebración del Domingo de Ramos.

El 20 de diciembre de 1985, coincidiendo con el Año Internacional de la Juventud de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el recordado pontífice instituyó este encuentro internacional que se realiza cada dos o tres años, pero que anualmente se celebra a nivel diocesano el Domingo de Ramos, teniendo como fin principal “colocar a Jesucristo en el centro de la fe y de la vida de cada joven”.

En una carta del papa san Juan Pablo II, escrita el 8 de mayo de 1996, el pontífice resaltó que “los jóvenes son invitados periódicamente a hacerse peregrinos por los caminos del mundo. En ellos la Iglesia se ve a sí misma y su misión entre los hijos de los hombres; con ellos acoge los desafíos del futuro, consciente de que toda la humanidad necesita una renovada juventud del espíritu. Esta peregrinación del pueblo joven construye puentes de fraternidad y de esperanza entre los continentes, los pueblos y las culturas. Es un camino siempre en movimiento. Como la vida. Como la juventud”.

Las JMJ desempeñaron un papel crucial durante el pontificado de san Juan Pablo II y sus sucesores; Benedicto XVI y el papa Francisco han continuado este legado como símbolo de unidad y esperanza de los jóvenes.

La clave de la vida

El Papa centró la homilía en la clave de la vida de Jesús. "Tú eres importante y Dios cuenta contigo por lo que eres, no por lo que tienes", dijo Francisco.

Recordó los obstáculos que tuvo que superar Zaqueo [jefe de publicanos y rico] en su encuentro con Jesús. "Nosotros tenemos el peligro de quedarnos lejos de Jesús porque creemos que no estamos a su altura", destacó.

El secreto de la alegría: no apagar la buena curiosidad, sino participar, porque la vida no hay que encerrarla en un cajón", papa Francisco

Exhortó a los jóvenes a no desanimarse y depositar toda su confianza en Jesús.

En tanto, los invitó a llevar este mensaje cuando retornen a sus países de origen.

El reto de Panamá

La elección de Panamá como sede de la XXXIV JMJ supone un gran reto no sólo para la Iglesia Católica, sino también para el Gobierno y el pueblo panameño.

Para la comunidad católica la JMJ permitirá fortalecer la unidad de la Iglesia en Latinoamérica.

Alrededor de mil jóvenes panameños se hicieron sentir en Cracovia durante el encuentro.

Cientos de personas en Panamá ven con buenos ojos que el encuentro se realice en el país en 2019.

El propio arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa, quien participa de la JMJ en Cracovia dijo que el país tiene la capacidad para ser sede de estas jornadas, al tiempo que calificó tal responsabilidad como una “oportunidad para que, como país nos podamos unir”.

Este evento tendrá un impacto en Panamá y la región, ya que muchos jóvenes y adultos motivados por encontrarse con el pontífice y que no pueden viajar a otros continentes podrán hacerlo a Panamá en 2019.

Además, involucra una preparación que requerirá la participación de diferentes organismos para garantizar la seguridad del Papa durante su permanencia en el país.

La Iglesia Católica, el Gobierno y la organización local deberán preparar el programa de la JMJ y toda la logística para acoger a los jóvenes peregrinos, generalmente hospedados por familias y albergados en escuelas y otros centros.

La celebración de la JMJ en 2019 coincide con el año en que se conmemoran los 500 años de la fundación de la ciudad de Panamá.

Buenos Aires, Argentina (1987); Santiago de Compostela, España (1989); Czestochowa, Polonia (1991); Denver, USA (1993); Manila, Filipinas (1995); París, Francia (1997); Roma, Italia (2000); Toronto, Canadá (2002); Colonia, Alemania (2005); Sydney, Australia (2008); Madrid, España (2011), Rio de Janeiro, Brasil (2013), Cracovia, Polonia (2016) han sido sedes de las JMJ y ahora le tocará a Panamá organizar la celebración internacional que unirá a miles de jóvenes en el istmo.