Trump: Cuba debe detener ataques contra enviados de EEUU
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que Cuba tiene el deber de parar misteriosos ataques contra diplomáticos de la embajada estadounidense en La Habana, que afectaron la salud de una veintena de enviados a la isla.
"Creo que Cuba es responsable. Creo eso y es un ataque muy inusual, pero creo que Cuba es responsable", declaró al presidente a periodistas en la Casa Blanca, al ser consultado sobre si el gobierno cubano pudo parar estos extraños ataques.
R.C. Hammond, principal asesor de asuntos públicos del secretario de Estado Rex Tillerson, confirmó a la AFP vía Twitter que Trump quiso decir que Cuba tiene una "responsabilidad de prevenir ataques, proteger a los diplomáticos".
Washington no ha acusado formalmente al gobierno cubano de ordenar los ataques, pero ha expresado su creciente frustración por su incapacidad para identificar y atrapar a los responsables.
Trump fue preguntado sobre el tema luego de que su jefe de gabinete, el general John Kelly, dijera el jueves pasado que Cuba no había hecho lo suficiente para prevenir una serie de "ataques" que según habían sugerido funcionarios estadounidenses pudieron haberse llevado a cabo con algún tipo de dispositivo acústico.
"Creemos que el gobierno cubano podía detener los ataques a nuestros diplomáticos", había dicho Kelly en rueda de prensa.
Los misteriosos "ataques" han afectado al menos a 22 empleados de la embajada de Estados Unidos en La Habana.
Los ataques habrían comenzado a fines de noviembre de 2016, y el último caso se registró en agosto pasado, según información del Departamento de Estado.
La Asociación Estadounidense del Servicio Exterior dijo que los afectados presentaron "daño traumático cerebral leve y pérdida de la audición, además de síntomas como desequilibrio, fuertes dolores de cabeza, dificultades cognitivas e inflamación cerebral".
Como respuesta a esta situación, Estados Unidos ordenó la semana pasada la expulsión de 15 diplomáticos cubanos en Washington.
Días antes había anunciado la reducción a la mitad del personal de su embajada en La Habana, además de suspender la emisión de visas y emitir un alerta con recomendaciones a que los ciudadanos estadounidenses eviten viajar a Cuba.
Estos raros "ataques", aún bajo investigación, motivaron la mayor crisis entre la isla y Estados Unidos desde que ambos restablecieran sus lazos diplomáticos en 2015, después de medio siglo de ruptura y desconfianza.
La Habana, en tanto, descarta cualquier responsabilidad en los episodios y afirma que las pesquisas en curso no han arrojado evidencia de que esos "ataques" hayan realmente ocurrido.