Venezuela defiende las garantías electorales y espera una alta participación
El canciller venezolano, Jorge Arreaza, defendió hoy en la ONU que hay todas las garantías para que las elecciones del 20 de mayo se conduzcan de manera apropiada y confió en que los países que han decidido no reconocer sus resultados terminen por aceptarlos al ver la alta participación.
"El reconocimiento a las elecciones lo tiene que dar el pueblo venezolano", subrayó Arreaza en una conferencia de prensa en la sede de la ONU, donde participó en varias reuniones sobre el mantenimiento de la paz.
El titular venezolano de Exteriores aseguró que la postura de los Gobiernos que han anunciado que no reconocerán los resultados "escapa a toda lógica" y no está amparada por el derecho internacional.
Sin embargo, confió en que cuando esos "interesados en Venezuela" vean la participación el 20 de mayo y cómo "el pueblo venezolano se vuelta una vez más en el proceso electoral", se vean obligados a "acompañar" la decisión que salga de las urnas.
Arreaza aseguró que el Gobierno aspira a que la participación supere el 60 por ciento y dijo que a los venezolanos no les preocupa la postura de otros países o de organizaciones como la Unión Europea sobre las elecciones presidenciales.
Según subrayó, los comicios cuentan con todas las garantías de limpieza gracias al sistema electoral venezolano, pero serán además observadas por actores externos.
Entre ellos, recordó, estarán varias organizaciones internacionales, delegaciones de la Unión Africana y de Rusia y un equipo que pondrá en marcha el expresidente del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.
Aunque Venezuela se lo solicitó, la ONU rechazó observar el proceso, según Arreaza porque consideraba que no tenía tiempo suficiente para prepararse.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, aspira a la reelección en estos comicios, y se enfrenta a otros cuatro candidatos.
En las elecciones, sin embargo, no participa la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) al considerar que son fraudulentas.
El ministro confió hoy en que esa oposición se "depure" tras los comicios y acusó a la prensa internacional, especialmente a la estadounidense, de falsear la situación en el país.
"Lo que uno ve a través de los medios de comunicación sobre Venezuela es la mentira absoluta", denunció.
Además, insistió en que su país es víctima de una campaña financiada desde Estados Unidos y otros lugares para "derrocar al Gobierno legítimo, constitucional, del presidente Maduro".
Arreaza dijo que Venezuela "se ha convertido en el centro de una agresión desde el punto de vista económico y político" y criticó las sanciones impuestas por EE.UU. o la UE, considerando que son incompatibles con el derecho internacional.
Pese a ello, insistió en que Caracas está siempre abierta al diálogo con Washington, aunque admitió que eso ha sido "muy difícil" bajo la Administración de Donald Trump.
"He intentando a veces encontrar puertas, ventanas, a veces rendijas, pero es difícil, se lo confieso", indicó.
En todo caso, aseguró que "el presidente Maduro estaría en disposición de reunirse con Trump" y que Venezuela siempre está buscando "canales de comunicación" con el Gobierno de EE.UU.
"Ojalá se dé una rectificación. (...) El balón está en la cancha de Estados Unidos. Nosotros estamos abiertos", añadió.