Moro compara el negacionismo de Bolsonaro al COVID-19 al de Lula con la corrupción
El exministro de Justicia brasileño Sergio Moro afirmó que el negacionismo del presidente, Jair Bolsonaro, frente a la pandemia del coronavirus se compara al del exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva cuando éste niega la corrupción en sus Gobiernos, en una entrevista publicada este domingo.
Al referirse a la gigantesca operación anticorrupción conocida como Lava Jato, que llevó a prisión a empresarios y líderes políticos, entre ellos Lula, quien está en libertad tras un año y medio en la cárcel, Moro señaló al diario Folha de Sao Paulo que el Partido de los Trabajadores (PT) debería "reconocer sus errores".
El negacionismo "es la estrategia que ellos adoptan, negando los crímenes que fueron practicados durante la Presidencia del PT, durante el período en que el partido tenía el control sobre (la petrolera estatal) Petrobras, junto a sus aliados".
En ese sentido, el exjuez federal, uno de los estandartes de la operación Lava Jato, dijo que ese negacionismo de Lula "es más o menos el equivalente a la postura del presidente de la República (Bolsonaro), que niega la existencia de una pandemia en el momento actual. Eso es un error".
El ultraderechista Bolsonaro llegó a minimizar la COVID-19, a la que se refirió como una "gripecita", y dejó de usar mascarillas de protección en la mayoría de los actos públicos, como lo exigen las autoridades de algunos estados que visita. Además siempre se mostró contrario a las cuarentenas y aislamientos rígidos.
Brasil, con cerca de 673 contagios, es después de Estados Unidos el segundo país con más número de casos confirmados de coronavirus y el tercero en muertes con casi 36.000 fallecimientos, detrás de EE.UU. y del Reino Unido.
Eventual candidatura
Moro fue cauteloso al comentar sobre alguna aspiración política, después de situarse en algunas encuestas de intención de voto al lado de Lula y cerca de Bolsonaro, quien a pesar de su deteriorada imagen y constantes disputas con los poderes Judicial y Legislativo aparece al frente de los sondeos para una posible reelección en 2022.
No obstante, manifestó estar "abierto" para adherirse a los movimientos que surgen ahora en favor de la democracia y contra el fascismo con el que es tachado Bolsonaro.
Para el exministro, Bolsonaro demuestra "evidencias de autoritarismo", pero descarta una alineación de la Fuerzas Armadas con él en un eventual golpe militar a los demás poderes, como proponen los partidarios del líder de ultraderecha en sus marchas todos los fines de semana, principalmente en Sao Paulo y Brasilia.
El exjuez indicó también que confía en la Justicia sobre sus denuncias contra Bolsonaro, a quien acusa de querer interferir en la Policía Federal, que fue el motivo de su salida del Gabinete.