Moro mostró mensajes y audios en su testimonio de ocho horas contra Bolsonaro
El exministro Sergio Moro presentó "conversaciones, audios y correos electrónicos" en su declaración de ocho horas ante las autoridades, dentro de la investigación contra el presidente Jair Bolsonaro por supuestas "injerencias políticas" en la Policía Federal, informaron este domingo medios locales.
El exjuez declaró el sábado en la Superintendencia de la Policía Federal de Curitiba, en el sur del país, para responder por las graves acusaciones que hizo contra el jefe de Estado cuando renunció a la cartera de Justicia la semana pasada.
El interrogatorio fue determinado por la Corte Suprema de Brasil, que autorizó abrir una investigación para esclarecer la veracidad de las denuncias de Moro y en la que figuran como investigados Bolsonaro y el propio exministro.
Según el diario 'O Estado de Sao Paulo', el antiguo magistrado, conocido por haber liderado la operación anticorrupción Lava Jato, presentó a las autoridades "conversaciones, audios y correos electrónicos" intercambiados con Bolsonaro durante el periodo que estuvo al frente del Ministerio de Justicia y Seguridad Pública.
Asimismo reiteró que el gobernante intentó "interferir políticamente" en la Policía Federal y puso a disposición su celular para un examen pericial, de acuerdo con el diario 'O Globo'.
El abogado de Moro, Rodrigo Sanches Rios, dijo en una nota enviada a ese periódico que "como la investigación está en curso, solo se manifestarán a través de los autos".
El exministro presentó su dimisión la semana pasada después de que el líder ultraderechista decidiera destituir por razones desconocidas al jefe de la Policía Federal, Mauricio Valeixo.
En su despedida, Moro criticó duramente a Bolsonaro, al que denunció por haber intentado entrometerse en los asuntos de la Policía Federal, que investiga a dos de los hijos del mandatario.
"El presidente me dijo que quería tener una persona con la que tuviera contacto personal, con la que pudiera recoger informaciones" o "informes de inteligencia", dijo el exministro en su última rueda de prensa como ministro de Justicia.
Con base a esas declaraciones, Bolsonaro pudiera haber incurrido en delitos de carácter penal, como coacción, prevaricación u obstrucción a la Justicia.
No obstante, el fiscal general de Brasil, Augusto Aras, designado para ese cargo por Bolsonaro el año pasado, también incluyó entre los investigados a Moro, pues en caso de que no se comprueben sus denuncias podría ser acusado de "calumnia".
Si por el contrario, hubiera indicios suficientes contra Bolsonaro, la Fiscalía pudría presentar una denuncia formal ante el Supremo, que sólo le daría curso con el aval de una mayoría de dos tercios de los votos en la Cámara de Diputados (342 de un total de 513).
Si esa mayoría fuera alcanzada, Bolsonaro sería suspendido de su cargo durante 180 días, que sería el plazo del Supremo para realizar el juicio, y en caso de ser declarado culpable sería destituido y le sucedería en el poder el vicepresidente, Hamilton Mourao.
Tras la declaración de Moro, la Policía Federal seguirá la investigación y elaborará un informe con sus conclusiones, el cual presentará después a la Fiscalía General.
Será entonces cuando el Ministerio Público Federal decidirá si presenta o no denuncia contra alguno de los investigados.