Madre de niños rescatados de la selva colombiana estuvo viva por cuatro días
NIÑOS DESAPARECIDOS | COLOMBIA
Bogotá, Colombia/La madre de los cuatro niños indígenas rescatados luego de una hazaña de supervivencia de 40 días en la selva colombiana permaneció con vida cuatro días tras el accidente de avioneta del 1 de mayo, reveló su esposo este domingo.
"Lesly lo único que me aclara es que la mamá estuvo cuatro días viva, entonces antes de morir la mamá les dice, tal vez, 'váyanse que ustedes van a mirar quién es su papá, quien sí sabe qué es amor de papá como se los demostré a ustedes'", declaró a la prensa Manuel Miller Ranoque junto al hospital militar en Bogotá donde se recuperan los menores de la comunidad huitoto.
Lesly de 13 años, Soleiny de 9 años, Tien Noriel de 5 y Cristin de 1 año fueron encontrados vivos el viernes en medio de la selva amazónica del sur del país y a 5 km del lugar del accidente, en el que fallecieron tres tripulantes adultos.
Entre el 15 y 16 de mayo, una cuadrilla de soldados encontró en el departamento del Caquetá al piloto muerto en la cabina. La avioneta quedó atrapada entre árboles y tenía la parte frontal destruida. Magdalena Mucutuy, madre de los niños, y un líder indígena también fallecieron, aunque los uniformados no especificaron dónde estaban sus cuerpos. Más de cien soldados e indígenas de la zona, apoyados por perros rastreadores, siguieron la pista de los menores mientras caminaban por la selva.
Lesly, quien tiene una naturaleza "guerrera" y es muy "inteligente", mantuvo a salvo a sus hermanos menores, según han contado a la AFP sus abuelos en entrevistas. La noticia de los niños perdidos dio la vuelta al mundo, con videos y fotografías del Ejército sobre el día a día de las operaciones de búsqueda en los que encontraron refugios improvisados con ramas, tijeras, ligas de cabello, zapatos, ropa, un biberón, frutas mordidas y huellas.
La búsqueda fue difícil por la espesa vegetación de la zona, con árboles que llegan a los 40 metros de altura, la presencia de jaguares y serpientes y la lluvia permanente que impide escuchar posibles llamados de auxilio. En esa región de difícil acceso por río y sin carreteras, los pobladores suelen viajar en vuelos privados. Los menores abordaron la avioneta junto a su madre el 1 de mayo para huir de los