Gobierno colombiano y ELN instalan comité que negociará un nuevo alto el fuego
Las delegaciones negociadoras del Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) instalaron este viernes en La Habana, nueva sede de los diálogos de paz, el Comité Técnico que trabajará en el diseño de un nuevo cese el fuego bilateral temporal.
El Comité estará integrado, por parte del Ejecutivo, por delegados del equipo negociador y oficiales de la Fuerza Pública en servicio activo, mientras que del ELN participarán miembros representantes acreditados en la Mesa de Diálogos, informaron las partes en un comunicado conjunto.
"Del avance del diseño del nuevo cese se informará a la Conferencia Episcopal de Colombia y a la Misión de Verificación de la ONU en Colombia", agrega la escueta nota.
La negociación de esta tregua es, junto al diseño de la participación social en el acuerdo de paz, el principal objetivo del quinto ciclo de los diálogos entre el Gobierno y la guerrilla del ELN, retomado la semana pasada en la capital cubana después de que Ecuador se retirara como garante y sede de las conversaciones.
Las partes esperan lograr un cese el fuego que dé continuidad al de 101 días alcanzado entre octubre y enero pasados, y que ha sido hasta ahora el mayor hito de las negociaciones de paz iniciadas en febrero del 2017 en Quito.
El pasado lunes, el ELN anunció un alto el fuego unilateral del 25 al 29 de mayo para facilitar el voto en las elecciones presidenciales que se celebran en Colombia el próximo 27 de mayo y apeló a la cláusula de honor para que las fuerzas oficiales también cesen sus operaciones en ese periodo.
Esta no es la primera vez que esta guerrilla declara una tregua electoral, pues en las presidenciales de 2014, en un hecho sin precedentes, tanto el ELN como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) -con las que se negociaba en aquel momento un acuerdo de paz- declararon un alto el fuego.
El ELN también cesó sus operaciones entre el 9 y el 13 de marzo pasados por las elecciones legislativas en las que participaron miembros de las ya desmovilizadas FARC, hoy convertidas en el movimiento político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común.
La Habana ya acogió durante casi cuatro años las conversaciones entre el Gobierno colombiano y las FARC, que culminaron con la firma de la paz en 2016 y el pase a la política de la guerrilla en activo más antigua de América.
Por el momento las partes no han concretado si una vez alcanzados los acuerdos que se negocian en el quinto ciclo permanecerán en Cuba para el resto del proceso, aunque en una entrevista con Efe esta semana el jefe negociador del ELN, Pablo Beltrán, dijo que la guerrilla no quiere "perder el tiempo con nuevas mudanzas".