El expresidente colombiano Uribe no ha sido nombrado ministro de Defensa

El expresidente colombiano Álvaro Uribe no ha sido designado ministro de Defensa, como aseguran mensajes difundidos en WhatsApp y redes sociales que muestran la imagen de un falso decreto de nombramiento para un cargo que en ningún caso podría asumir, al ser incompatible con su reciente etapa como senador.

"Uribe el matarife viene de nuevo como ministro de Defensa!", proclama un usuario de Twitter junto a la foto del supuesto decreto de nombramiento, que lleva la firma del presidente colombiano, Iván Duque, y la fecha del 16 de noviembre de 2020.

Otros mensajes cuestionan en cambio la veracidad del documento. El autor de un tuit con esa foto que ha sido retuiteado por casi un millar de personas apunta que "tiene que ser falso", mientras que, en Facebook, el autor de una publicación que incluye también el presunto decreto se pregunta: "¿Qué tan sierto (sic) es?".

Identificado con el número de serie 2272, el supuesto documento oficial del Ministerio de Defensa colombiano fecha el 16 de noviembre el nombramiento de Uribe para asumir esta cartera, precisa que la designación entrará en vigor el día de su expedición e incluye datos como el número de documento de identidad atribuido al expresidente y líder del partido oficialista Centro Democrático.

Finalmente, en el documento destaca la firma del actual presidente colombiano Iván Duque, heredero político de Uribe.

En realidad, la imagen es un montaje gráfico que manipula el decreto oficial de noviembre de 2019 por el que se designaba en el mismo cargo a Carlos Holmes Trujillo, que sigue siendo ministro de Defensa. Además, Uribe no podría asumir esta responsabilidad en aplicación del régimen de incompatibilidades impuesto por la Constitución colombiana.

Un documento de 2019 manipulado

El documento original se puede encontrar en los archivos de la Presidencia colombiana: Se trata del decreto número 2072, también con fecha 16 de noviembre, pero de 2019, por el que se designó ministro de Defensa Nacional a Holmes Trujillo.

Sobre la base del decreto original, con el mismo articulado y la misma firma del presidente Iván Duque, se ha modificado el año, el nombre del designado y el número de su documento de identidad, al que se ha añadido su ciudad de nacimiento, un dato que no es habitual incorporar en este tipo de documentos.

En todo caso, resultaba llamativo que un decreto oficial de nombramiento del Gobierno circulara en internet un mes antes de la fecha de designación que figura en el propio documento.

Uribe no puede ser ministro

Además, el expresidente Uribe no podría asumir una cartera ministerial en estos momentos por haber sido senador hasta el pasado agosto, ya que la Constitución colombiana impide desempeñar un cargo público o privado a quien sea congresista o a quien lo haya sido hasta hace menos de un año.

El exjefe de Estado renunció a su escaño en el Senado a mediados de agosto, dos semanas después de que la Corte Suprema de Justicia (CSJ) ordenara su detención domiciliaria en el caso abierto contra él por presunto fraude procesal y soborno de testigos.

Según explicó a EFE Germán Lozano Villegas, profesor de Derecho Constitucional en la Universidad Externado de Colombia, Uribe no puede ser nombrado ministro de Defensa por esa incompatibilidad y también porque un expresidente, como es él, no puede formar parte de un Gabinete en el que la ausencia del actual jefe del Estado le obligue en algún momento a ejercer tareas presidenciales.

En lo que respecta a su reciente condición de senador, el artículo 180 de la Carta Magna de 1991 dispone que los parlamentarios colombianos no pueden desempeñar "cargo o empleo público o privado" alguno, salvo los asociados a la Academia. En caso de renuncia al escaño, el artículo 181 aclara que esa incompatibilidad "se mantendrá durante el año siguiente a su aceptación".

Lozano considera en cualquier caso una incompatibilidad aún "más importante" el hecho de que, desde que se prohibió la reelección presidencial en Colombia, un expresidente no puede volver a ejercer esas funciones, algo que podría ocurrir si Uribe formara parte del Gobierno y el actual jefe del Estado se ausenta del país.

"De acuerdo con la Constitución colombiana -explica este experto-, cuando el presidente no está en el país queda lo que se llama el ministro delegatario; es decir, un ministro que asume las funciones de jefe de Gobierno".

"Potencialmente, si Uribe quedara como ministro, en el hipotético caso de que el presidente no esté o de que ningún otro ministro pueda hacerlo, él podría quedar ejerciendo funciones presidenciales y, habida cuenta la prohibición de reelección y de ejercer la Presidencia quien ya la haya ejercido, él no lo podría hacer", añade Lozano.

La reelección presidencial quedó prohibida en Colombia en 2015, después de que el Congreso eliminara una reforma de 2004 que permitió asumir un nuevo mandato al propio Uribe y, posteriormente, también a su sucesor Juan Manuel Santos.

Enjuiciado por supuesto fraude procesal y sobornos

Uribe reapareció ante la opinión pública el pasado 12 de octubre, tras casi 70 días en detención domiciliaria, con una declaración en la que, a pesar de haber renunciado al Senado, mostró que está lejos de apartarse de la política y que seguirá oponiéndose al socialismo latinoamericano y a la justicia transicional de paz.

"Mi vida pública ha generado mucha controversia, pero carezco de voluntad para dejar de pensar en Colombia; no puedo renunciar a advertir las amenazas que nos acechan", manifestó entonces el exmandatario.

Álvaro Uribe, de 68 años y presidente de Colombia entre 2002 y 2010, quedó en libertad por decisión judicial a principios de octubre, después de haber permanecido en detención domiciliaria desde el 4 de agosto por orden del Supremo como parte de la causa abierta contra él por supuesto fraude procesal y soborno en actuación penal.

Como consecuencia de su renuncia a la condición de parlamentario, este proceso judicial, que le enfrenta al senador Iván Cepeda, del partido de izquierdas Polo Democrático Alternativo (PDA), ha pasado de la Corte Suprema de Justicia a la Fiscalía.