Exdictador surinamés dice que aceptará veredicto sobre ejecución de opositores
Ejecución
Paramaribo, Surinam/El expresidente de Surinam, Desi Bouterse, dijo este lunes que aceptará el veredicto en el juicio de apelación sobre una condena previa por el asesinato de 15 opositores en 1982"sea cual sea".
"Lo acataremos sea cual sea, estoy preparado", dijo el exdictador de 77 años en su última declaración en este proceso que se celebra en una corte de Paramaribo. "Estoy convencido de que el otro juez, el de historia, me absolverá al 100%".
Bouterse confía en la declaración de inocencia, mientras que la fiscalía pidió 20 años de cárcel para el político, condenado en 2019 a esa misma pena por el asesinato de abogados, periodistas y empresarios en diciembre de 1982, dos años después de tomar el poder tras un golpe de Estado.
"Rezo para que el Todopoderoso le bendiga con la sabiduría y el valor necesarios para dictar la sentencia final, aunque no sea del agrado de la madre patria (Países Bajos, del que Surinam fue colonia)", añadió en su discurso que se prolongó por una hora y le siguió a la intervención de sus abogados.
Bouterse tiene una condena de 11 años de cárcel en Países Bajos de 1999 por tráfico de cocaína. Nunca la cumplió, pues su cargo presidencial lo protegió de la extradición. El presidente del tribunal, Dinesh Sewratan, dijo que el veredicto se anunciará en el último trimestre de 2023, ya que los jueces entran de vacaciones el 15 de agosto hasta el 1 de octubre.
Bouterse dijo a la prensa que asistiría a esa audiencia. Tanto Bouterse como su abogado, Irvin Kanhai, en su alegato acusaron a Países Bajos de apoyar a grupos que pretendían derrocarlo. Según ellos, Holanda había planeado una invasión del país y los 15 hombres ejecutados estaban preparando un golpe de Estado.
A principios de año, Bouterse admitió haber oído disparos el día en que fueron asesinados los opositores, pero negó haber dado la orden de ejecutarlos, insistiendo en que planeaba expulsarlos del país.
Bouterse llegó al poder con 34 años, siendo un sargento mayor del Ejército. Se retiró en 1987 bajo la presión internacional, pero volvió al poder en 1990 tras un segundo golpe, esta vez sin derramamiento de sangre. Dejó el cargo un año más tarde. Luego fue elegido presidente en 2010 y lo fue hasta 2020.