El ELN inicia una tregua navideña en Colombia
La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) comenzó hoy un cese el fuego unilateral que ha sido recibido con escepticismo por el Gobierno colombiano, que le exige dejar todas sus actividades criminales, especialmente el secuestro, para poder retomar los diálogos de paz.
El ELN, que hoy no ha hecho ninguna referencia oficial al inicio del cese el fuego, hizo el anuncio de su tregua navideña el pasado 17 de diciembre y la prolongará hasta el 3 de enero de 2019 "para aportar a un clima de tranquilidad en la Navidad y el Año Nuevo".
Además, con esta tregua el ELN busca tener un gesto con el cual aspiran a que se retomen las negociaciones de paz en Cuba, suspendidas desde que el presidente Iván Duque asumió su cargo el pasado 7 de agosto.
Fuentes del ELN comentaron a Efe acerca del cese el fuego, que comenzó a las 00.00 de este domingo, que "debe quedar claro que es cese de operaciones ofensivas", con lo que no responden al llamado del Gobierno de poner fin a todas sus actividades criminales.
La jornada del inicio de cese el fuego ha pasado desapercibida y ha quedado en buena medida a la sombra de la muerte el pasado viernes de Walter Patricio Arizala, alias "Guacho", líder de un grupo de disidentes de las FARC, abatido en una operación militar.
"Guacho" era el cabecilla del grupo autodenominado "Frente Oliver Sinisterra", uno de los que buscan hacerse con el control del extenso y selvático municipio de Tumaco, fronterizo con Ecuador.
Precisamente, el ELN es otro de los grupos que buscan controlar esa localidad, que también alberga el segundo mayor puerto de Colombia en el océano Pacífico.
Por eso, el presidente Duque fue preguntado ayer al hacer balance de la operación si iban a continuar las operaciones militares en la zona, especialmente contra el ELN al comenzar un cese el fuego unilateral.
Duque respondió que "Colombia tiene que obrar con la contundencia necesaria contra todas las formas de crimen organizado".
"Colombia necesita que este ejemplo de unidad de las fuerzas se mantenga en el territorio para cumplir lo que dice nuestra Constitución: la defensa de la vida, honra y bienes de todos los colombianos", subrayó.
La declaración de Duque está en la línea de la que hizo horas después del anuncio del ELN de que iniciaría la tregua, cuando insistió en que esa guerrilla debe liberar a los secuestrados y parar sus actividades criminales para retomar las negociaciones de paz en Cuba.
Ya el año pasado, cuando las negociaciones tenían como sede Quito, el Gobierno del entonces presidente Juan Manuel Santos y el ELN acordaron un cese el fuego bilateral de 101 días que estuvo vigente entre el 1 de octubre de 2017 y el 9 de enero de 2018.
En aquella ocasión la tregua fue bilateral, contó con el monitoreo de la ONU y la Iglesia católica, de cuyo clero salieron varios líderes históricos del ELN, y tuvo como fin crear condiciones más propicias para avanzar hacia un acuerdo de paz.
Sin embargo, tras ese cese el fuego, el ELN retomó sus ataques de manera especialmente sangrienta con dos atentados en la ciudad caribeña de Barranquilla contra sendas estaciones de Policía y un tercero contra los agentes del pueblo de Buenavista, en el municipio de Santa Rosa, en el departamento de Bolívar (norte).
En total murieron siete policías y al menos una decena de personas resultaron heridas.
El sexto ciclo de negociaciones entre Gobierno y ELN concluyó el pasado 1 de agosto en la capital cubana. Desde esa fecha, las dos delegaciones no se han vuelto a sentar a la mesa de diálogos.