Disidentes de FARC deben retomar diálogo para mantener tregua en Colombia, advierte Petro
FARC
Bogotá, Colombia/El presidente de Colombia, Gustavo Petro, advirtió este martes a la principal disidencia de las FARC que el futuro del cese al fuego dependerá de su regreso a la mesa de negociaciones, suspendida por los guerrilleros el fin de semana.
El denominado Estado Mayor Central (EMC) de las FARC, conformado por rebeldes que se negaron a firmar el acuerdo de paz de 2016, anunció el domingo su decisión de suspender los diálogos por operaciones militares en sus zonas de influencia, aunque mantuvo la tregua acordada hasta el 15 de enero.
"El EMC ha resuelto no asistir a la mesa de negociación sin romper la tregua. Eso no es posible. El cese al fuego solo es posible si avanza la negociación", escribió Petro en X, antes Twitter.
El gobierno y los disidentes habían instalado una mesa de diálogos el 16 de octubre en Tibú, un municipio pegado a la frontera con Venezuela.
Los rebeldes insistieron el fin de semana que tropas del ejército entraron a la fuerza al Cañon del Micay, un territorio del suroeste del país que ellos controlan desde hace años, y violaron las condiciones de las negociaciones.
Civiles retuvieron a unos 100 uniformados por algunas horas. La Fuerzas Militares denominaron esa acción como un "secuestro" y denunciaron que los pobladores están siendo instrumentalizados y amenazados por el EMC.
La suspensión de las negociaciones supone un nuevo revés para la política de "paz total" del presidente Petro, con la que pretende desarticular todos los grupos armados del país mediante el diálogo.
El Ejército de Liberación Nacional (ELN), también en conversaciones desde noviembre de 2022, confesó la semana pasada que secuestró al papá del futbolista del Liverpool Luis Díaz en el departamento de La Guajira (norte).
El padre del jugador debería ser liberado este martes, según comunicó el gobierno.
Pese al desarme del grueso de las FARC tras el acuerdo de 2016, el conflicto armado en Colombia persiste luego de seis décadas de violencia que dejan 9,5 millones de víctimas.
El EMC se marginó del pacto y hasta 2022 tenía más de 3.500 combatientes, según inteligencia militar.