El Consejo Electoral de Ecuador desmiente fraude y rechaza 'infamias'
El presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Ecuador, Juan Pablo Pozo, rechazó hoy las acusaciones de fraude hechas por el candidato opositor a la Presidencia del país, Guillermo Lasso, y aseguró que, de haberlo, sería un "fraude moral" por "tanta infamia y tanta mentira" vertida sobre las elecciones.
Pozo respondió a las imputaciones de irregularidades hechas por Lasso, candidato del movimiento Creando Oportunidades (CREO, centroderecha), quien anunció que impugnará los elecciones del pasado domingo.
Según los resultados oficiales, con el 99,75% de los votos escrutados el candidato oficialista Lenín Moreno, de Alianza País (AP, izquierda), ganó las elecciones al obtener el 51,16% de los votos, mientras que Lasso obtuvo el 48,84%.
Pozo destacó que desde el cierre de las urnas se han presentado 24 reclamaciones referentes a 400 de las 41,000 actas.
Explicó que para que las quejas sean consideradas deben aportarse documentos como las copias de las actas con irregularidades, para que puedan ser contrastadas con las que tiene el CNE.
El presidente de ese órgano criticó una encuesta a boca de urna de la firma Cedatos que, según él, dijo "cosas diametralmente opuestas" a dos recuentos rápidos y otro sondeo a boca de urna efectuados ese día, así como a los resultados oficiales ofrecidos por el órgano rector de los comicios desde la misma noche de las elecciones.
El recuento rápido de la Escuela Politécnica Nacional otorgó a Lasso el 48,85% de los votos y a Moreno el 51,15% y el de la corporación Participación Ciudadana dio a Lasso el 49,2% y a Moreno el 50,8% de los sufragios.
A su vez, la encuesta a boca de urna de Perfiles de Opinión otorgaba al opositor un 47,8% de los votos y a Moreno un 52,2%, mientras que la de Cedatos señalaba un 53,02% de los votos para Lasso y un 46,98% en favor de Moreno.
"Por ese 'exit poll' (encuesta a boca de urna) está el país así", dijo Pozo en referencia a las protestas que desde la noche electoral se suceden en diferentes ciudades de Ecuador contra un supuesto "fraude".
La oposición, al margen de ese sondeo, afirma que posee pruebas de las actas con irregularidades, si bien Lasso reclamó la victoria electoral instantes después de conocerse esa encuesta y antes de que se conocieran resultados oficiales, mientras Moreno hizo lo propio a partir de la de Perfiles de Opinión.
Pozo aseguró que se aceptarán los recursos de objeción, impugnación y apelación que eventualmente se presenten siempre que se acompañen de la documentación correspondiente pero, al mismo tiempo, insistió en que no se deben comparar los resultados de una encuesta a boca de urna con los resultados oficiales, ya que ello "carece de toda lógica".
Además, Pozo citó los informes de los observadores internacionales llegados a Ecuador para acompañaron el proceso que, según dijo, destacaron la normalidad con la que se desarrolló y, en especial, el de la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Ese organismo dijo el lunes en un comunicado que sus observadores compararon la información que recolectaron sobre los resultados con la de las actas de escrutinio publicadas por el CNE y constataron que "no hubo discrepancias" entre los datos, lo que fue resaltado hoy por Pozo.
El máximo responsable de la organización de las elecciones también se refirió al bloqueo temporal en la página web del CNE durante el escrutinio e indicó que la causa fueron los "ataques" que sufrió, al igual que otros muchos sitios web esa noche, pero aseguró que pese a ello, "el procesamiento de datos no tuvo ningún tipo de retraso".
"Aquí no se ha regalado ni quitado un solo voto a nadie", aseguró contundente Pozo.