Unos 60 soldados de Colombia completan dos días "secuestrados" por campesinos
Colombia vive un conflicto armado de seis décadas que ha dejado 9,5 millones de víctimas entre secuestrados, desaparecidos, desplazados y asesinados.
Unos 60 soldados de Colombia completan este lunes dos días "secuestrados" por campesinos aparentemente influenciados por una facción de disidentes de la exguerrilla FARC, a quienes el gobierno advierte del fin del cese al fuego si no los liberan.
Los uniformados permanecen cercados por alrededor de 650 campesinos en una zona rural de San José del Guaviare (sur), informó el alcalde de esa ciudad, Willy Rodríguez, a Caracol Radio. Inicialmente, 100 soldados habían sido retenidos el sábado, pero 40 recobraron la libertad horas después, dijo una fuente del Ejército a la AFP.
El fin de semana el ministro de Defensa, Iván Velásquez, calificó el hecho como un "secuestro" y señaló a un frente de las disidencias de las FARC llamado Jorge Suárez Briceño de estar detrás de los campesinos. Ese bloque guerrillero, que se negó a firmar el acuerdo de paz de 2016, está negociando con el gobierno del presidente Gustavo Petro y acordó un cese al fuego bilateral desde octubre de 2023.
Velásquez advirtió que la tregua se podría suspender "si no existe real compromiso de parte de ese grupo ilegal". El Ejército aseguró que estaba en la zona realizando una operación contra la extorsión.
El alcalde Rodríguez agregó que el domingo visitó la zona y observó que los uniformados con su armamento. De acuerdo con su relato, los campesinos impiden a los soldados movilizarse para evitar una "confrontación" con los disidentes y esperan que el gobierno envíe representantes para coordinar su salida de la zona.
En regiones conflictivas como el departamento del Guaviare la fuerza pública suele tener choques con campesinos, especialmente cuando erradican narcocultivos. En abril, 34 uniformados fueron detenidos y luego liberados por una comunidad en el departamento del Meta (sur). Un año atrás una protesta contra Emerald Energy terminó en el secuestro de más de 70 policías antimotines y seis empleados de la petrolera en San Vicente del Caguán (sur). Uno de los uniformados murió supuestamente degollado.
Colombia vive un conflicto armado de seis décadas que ha dejado 9,5 millones de víctimas entre secuestrados, desaparecidos, desplazados y asesinados.