Rushdie da primeras señales de recuperación tras atentado
Atentado terrorista
El escritor británico Salman Rushdie "comenzó la recuperación", dijo su agente el domingo, dos días después de ser apuñalado en un acto literario en el estado de Nueva York.
"Salió de la respiración asistida, de manera que comenzó la recuperación", señaló el agente literario Andrew Wylie en una declaración enviada a varios medios.
"Llevará tiempo. Las heridas son severas pero su estado se encamina en la dirección correcta", añadió.
Tras el ataque, el agente había informado que Rushdie podría perder un ojo y que también había sido herido en el hígado.
La familia está "extremadamente aliviada" de que haya dejado la respiración asistida y dicho "unas pocas palabras", señaló desde Londres su hijo Zafar en Twitter
"Mi padre aún se encuentra en estado crítico en el hospital y está recibiendo un tratamiento intensivo y continuo", añadió
"Estamos extremadamente aliviados de que ayer le quitaran el respirador y pudiera decir algunas palabras", continuó e indicó que, pese a la "gravedad" de unas lesiones "que le cambiarán la vida", "su sentido del humor peleón e insolente se mantiene intacto".
El escritor, que pasó años con protección policial luego de que líderes religiosos musulmanes ordenaran matarlo por considerar que blasfemaba al islam en su novela "Los versos satánicos", se aprestaba a hablar en un evento literario el viernes cuando un hombre salió del público, subió al estrado y lo apuñaló reiteradamente en el cuello y abdomen.
El sospechoso, Hadi Matar, de 24 años, fue derribado por custodios y espectadores antes de que Rushdie fuera enviado en un helicóptero a un hospital.
El ataque fue tan súbito que sorprendió al moderador del evento, Henry Reese. "Fue difícil de entender. Parecía una suerte de broma pesada", dijo Reese el domingo al canal CNN, en donde se lo vio con un vendaje sobre su hinchado y amoratado ojo derecho.
"Luego había sangre detrás suyo. Era real", añadió.
- Hijo de un pastor -
Matar compareció el sábado ante una corte y se declaró no culpable de los cargos de intento de homicidio y ataque con arma. Quedó detenido sin derecho a fianza.
Las autoridades estadounidenses dieron mínima información sobre Matar o sobre las razones de su ataque.
Aparentemente su familia proviene de la ciudad de Yaroun, al sur de Líbano, aunque nació en Estados Unidos, según un funcionario libanés.
Los padres de Matar son divorciados y su padre, un pastor, aún vive allí, reportó un periodista de AFP que recorrió el lugar.
Los periodistas que intentaron acercarse al padre fueron retirados.
Rushdie, de 75 años, ha vivido esquivando una sentencia de muerte dictada en 1989 por el líder espiritual iraní, el ayatolá Ruhollah Jomeini, quien ordenó a todos los musulmanes matar a Rushdie.
La orden religiosa (fetua) fue emitida luego que Rushdie publicó "Los versos satánicos" que fue considerada una blasfemia por muchos musulmanes.
- "Volviendo a la normalidad" -
En una reciente entrevista con la revista alemana Stern, Rushdie contó cómo, luego de muchos años viviendo amenazado de muerte, su vida estaba "volviendo a la normalidad"
"Por un tiempo, ocho o nueve años, fue algo bastante serio", dijo a Stern en Nueva York.
"Pero desde que vivo en Estados Unidos desde 2000, realmente no ha habido ningún problema", añadió.
Luego de instalarse en Nueva York, se hizo ciudadano estadounidense en 2016. Pese a las permanentes amenazas a su vida, frecuentemente era visto en público y, a menudo, sin una notoria custodia.
La seguridad no era especialmente grande el viernes cuando se presentó en la Chautauqua Institution, una entidad que acoge actividades culturales en esa localidad cercana a la ciudad de Buffalo.
El ataque generó indignación en intelectuales, políticos y personas comunes en todo el mundo.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que escritor fue víctima de un "feroz ataque" y elogió a Rushdie "por rehusarse a ser intimidado o acallado". El primer ministro británico, Boris Johnson, afirmó sentirse "horrorizado".
No obstante, hubo expresiones de satisfacción en países islamistas como Irán o Pakistán.