Relaciones EEUU-Rusia en nivel más bajo tras Guerra Fría
Las relaciones entre Estados Unidos y Rusia nunca fueron tan malas después de la Guerra Fría como ahora y "no se orientan a un nuevo comienzo", lamentó el domingo el jefe de la diplomacia estadounidense, Rex Tillerson.
El secretario de Estado, expresidente de la petrolera ExxonMobil y en esa condición condecorado en 2013 por el presidente ruso Vladimir Putin, ya había lamentado estas últimas semanas que los lazos entre las dos potencias hubieran caído a "su más bajo nivel" desde la desaparición de la Unión Soviética en 1991.
Su homólogo ruso, Serguei Lavrov, recibido el miércoles en la Casa Blanca por el presidente Donald Trump, hizo la misma constatación.
Interrogado por la cadena NBC, Tillerson reafirmó que las relaciones habían caído "al más bajo nivel de los tiempos desde el fin de la Guerra Fría, con un muy débil nivel de confianza".
"Generalmente se considera que no es sano para el mundo (...). Ciertamente no es sano para nosotros, para el pueblo estadounidense, para nuestros intereses de seguridad nacional", destacó.
Tillerson se mantuvo muy dubitativo acerca de una distensión entre los dos países, con relaciones particularmente probelmáticas desde 2012 a causa del conflicto en Siria y luego en el de Ucrania.
El jefe de la diplomacia estadounidense descartó cualquier "nuevo comienzo" entre Washington y Moscú, como el que habían intentado en 2009 el entonces presidente Barack Obama y su secretaria de Estado, Hillary Clinton.
"Palabras tales como 'reinicio' han sido superadas. No se puede recomenzar. No se puede borrar el pasado. No se puede asumir un nuevo comienzo. Se parte de lo que se tiene", insistió Tillerson.
Sobre las acusaciones de los servicios de inteligencia estadounidenses sobre una injerencia rusa en las elecciones norteamericanas, Tillerson reconoció que "los rusos dieron vueltas en torno a nuestro proceso electoral".
Pero "como también subrayaron esos informes de inteligencia, no se ha podido concluir qué efecto pudo tener eso", agregó.