El polémico proyecto de Turquía que se inspiró en el Canal de Panamá
Canal de Panamá
El pasado 26 de junio cuando el Canal de Panamá celebraba 5 años de su ampliación, el presidente turco Recip Tayip Erdogan inauguraba el proyecto de construcción conocido como Kanal Istanbul, en español es “El Canal de Estambul”.
Este proyecto definido por el propio Erdogan como “su proyecto loco” tendrá 45 kilómetros de largo y unirá de manera artificial Europa y Asia, sin embargo, esta mega construcción que se inspiró en los canales de Panamá y Suez no es del agrado de los ciudadanos turcos, porque tendría grandes impactos ambientales, sociales, geopolíticos y económicos.
El Canal de Estambul demorará 7 años, tendrá 25 metros de profundidad y entre 250 y 1,000 metros de ancho. Su construcción correrá paralelo con el estrecho del Bósforo, una ruta natural que está saturada y es considerada peligrosa, porque es muy estrecha.
Las proyecciones del gobierno turco es que por esta ruta transiten a diario 185 barcos. El costo de construcción será de 8 mil millones de dólares.
"El objetivo principal de este proyecto es reducir los riesgos que supone el paso de buques cargados de materiales peligrosos a través del Bósforo", aseguró en 2018 el Ministerio de Transportes de Turquía en una publicación del diario BBC Mundo en español.
En 2016, alrededor de 42,000 barcos circularon por la única vía natural navegable entre Europa y Asia. En el mismo período, 16,800 buques cruzaron el Canal de Panamá y una cifra similar navegó a través del Canal de Suez”.
Los argumentos de quienes se oponen
En la administración de Erdogan que está en el poder desde el 2013 se han hecho varias mega obras de infraestructura con el objetivo de reactivar la economía. El plan de llevar adelante su “proyecto loco” ha tenido muchas críticas.
Autoridades locales de Estambul aseguran que este canal convertiría a la ciudad en una isla, ya que quedaría en medio del nuevo canal y del estrecho del Bósforo.
Mientras que los científicos destacan que esto impactará en la salinidad del agua que tendrá consecuencias en los ecosistemas del mar Negro y del mar de Mármara.
"Si decides unir los dos mares no puedes pensar en los próximos cinco o diez años, o en las próximas elecciones, o en el aniversario de la república turca. Tienes que pensar en términos de tiempo geológico, porque una vez que haces esto ya no hay vuelta atrás", dijo a la National Geographic, Cemal Saydam, profesor de ingeniería ambiental en la Universidad Hacettepe de Ankara.
A nivel geopolítico se señala a la administración de Erdogan de violar la “Convención de Montreux”, que otorga a Turquía el control del Bósforo y los Dardanelos y debe mantener el libre tránsito de civiles en tiempos de paz. Con un canal administrado exclusivamente por el gobierno de Ankara, la situación podría complicarse.
Desde Rusia, Vladimir Putin ha dicho que Turquía debe “preservar” la Convención de Montreux.
Al final este proyecto puede tener implicaciones geopolíticas desde el punto militar y económico que le daría gran ventaja a los turcos y capacidad de negociación con sus aliados y no aliados.