Presidente de Egipto visita Madrid

El presidente egipcio Abdel Fatah al Sisi se reunió este jueves con el jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, durante una visita de un día a Madrid, muy criticada por los defensores de los derechos humanos.

En el marco de esta visita, la primera de un presidente egipcio a España desde 2006, los ministros del Interior de ambos países firmaron un acuerdo de colaboración en la lucha contra el "terrorismo", la inmigración ilegal y el crimen organizado.

También se firmaron varios memorandos de entendimiento. Uno para estudiar la creación de un "corredor ferroviario de alta velocidad" entre El Cairo y Luxor, junto a otros sobre protección de bienes culturales y turismo, informó una fuente diplomática.

Al Sisi, que llegó de Nicosia donde acordó el miércoles con Grecia y Chipre intensificar la lucha contra el "terrorismo", comió después con los reyes, Felipe y Letizia, antes de acudir por la tarde al Congreso de los Diputados.

"En estos momentos de guerras y turbulencias en vuestra región, Egipto destaca por ser clave para la estabilidad y el equilibrio de Oriente Próximo", dijo el rey Felipe en su discurso durante la comida de gala.

En una entrevista publicada el miércoles por el rotativo español El Mundo, Al Sisi se erige en muro de contención del grupo Estado Islámico, llamando indirectamente a los europeos a apoyarlo, ya que si el Estado egipcio "se derrumba, la región irá al desastre", aseguró.

En este contexto, logró que Washington le levantara el embargo sobre la entrega de cazas F-16, impuesta en octubre de 2014 tras una sangrienta represión. Francia también anunció la venta de 24 aviones Rafale.

Su visita a Madrid, miembro no permanente del Consejo de Seguridad hasta 2016, ha sido recibida con críticas, en particular por Amnistía Internacional que envió una carta abierta al gobierno.

Desde que derrocó al expresidente islamista Mohamed Morsi, en julio de 2013, Al Sisi, exjefe del ejército elegido presidente en mayo de 2014, ha sido acusado por sus detractores de instaurar un régimen autoritario.

"Hemos podido comprobar cómo se restringe la libertad de expresión de disidentes y periodistas, cómo se da mayor competencia a los tribunales militares para juzgar a civiles, y cómo se permite que las fuerzas de seguridad empleen la tortura y el uso excesivo de la fuerza impunemente", lamentó el director de la sección española de Amnistía, Esteban Beltrán, en un comunicado.

La ONG también denuncia las 509 condenas a muerte dictadas en 2014 y la ejecución de al menos 15 personas.