Presidenta de Taiwán prometió en gira centroamericana asistencia a sus "aliados"
La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, llegó este domingo a Belice, última etapa de una gira centroamericana que la llevó también a Guatemala, donde prometió seguir apoyando a sus "aliados diplomáticos" para disuadirlos de vincularse a China. El avión de la mandataria aterrizó en la tarde en el aeropuerto internacional de la Ciudad de Belice, donde recibió honores militares.
"La presidenta Tsai Ing-wen, ha llegado a Belice y en este minuto ella va a ir a hacer una reunión con los ciudadanos de Taiwán que están aquí en Belice y mañana va a tener una cita con el primer ministro de Belice, John Briceño", dijo un presentador de la televisión oficial beliceña, que transmitió la ceremonia de bienvenida.
Se espera que el lunes Tsai y Briceño reafirmen su alianza, días después de que Honduras se convirtió en el quinto país centroamericano en romper con Taiwán y establecer lazos diplomáticos con China.
Tras la ruptura con Honduras, solo 13 países reconocen a Taiwán. Bajo el principio de "Una sola China", Pekín no permite que ningún país tenga lazos diplomáticos con ellos y con los taiwaneses a la vez.
"Seguiremos solidarizándonos"
En su última actividad pública en Guatemala, Tsai prometió este domingo que seguirá proporcionando asistencia a sus aliados.
"Taiwán continuará asistiendo al desarrollo sustancial y prolongado de sus aliados diplomáticos, no dejaremos de seguir colaborando con los socios democráticos del mundo", afirmó Tsai en un discurso al visitar un hospital construido con una donación de Taipéi.
"En adelante, Taiwán y Guatemala seguiremos solidarizándonos uno con el otro, profundizando la cooperación en todas las áreas posibles en base a los objetivos de la diplomacia de paso firme, solidario y de mutuo beneficio", agregó.
Por su parte, el presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, prometió en un discurso que su país mantendrá el reconocimiento diplomático de Taiwán, una semana después de que Honduras rompió lazos con Taipéi y los estableció formalmente con Pekín.
"Reafirmo ante usted mi compromiso incondicional de que Guatemala, como parte esencial de su política exterior, va a seguir en favor del reconocimiento de la soberanía de la República de China Taiwán", expresó.
Ambos mandatarios visitaron el nuevo hospital regional de Chimaltenango, en el oeste de Guatemala, construido con una donación taiwanesa de 22 millones de dólares.
Cooperación no reembolsable
Según la secretaría de planificación de Guatemala, la cooperación no reembolsable taiwanesa entre 2013-2021 llegó a 90 millones de dólares, tres millones más que la asistencia otorgada por la Unión Europea.
En 2021 Taipéi firmó con Guatemala otro acuerdo por 60 millones de dólares no reembolsables para los próximos cuatro años.
Tsai y Giammattei se estrecharon las manos el sábado frente a un antiguo templo maya en el sitio arqueológico de Tikal, en el norte del país, como símbolo de amistad.
Los dos presidentes tuvieron una reunión privada el viernes y luego Giammattei dijo que la visita de Tsai "es muy significativa para renovar y reafirmar el total respaldo al gobierno de Taiwán".
Además, Giammattei insistió que su país reconoce a Taiwán "como una nación independiente y como la única y verdadera China".
Tsai le agradeció a Giammattei su apoyo el año pasado en momentos en que China realizaba maniobras militares en las cercanías de la isla.
Este domingo ratificó ese apoyo al abogar "por la pronta finalización de las tensiones generadas por China continental en el Estrecho de Taiwán, que siembran zozobra y arrebatan la felicidad y la paz a los ciudadanos de República de China Taiwán".
Escala en EEUU
En su viaje de regreso a Taiwán, la presidenta planea reunirse en el estado de California con el presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Kevin McCarthy, lo que indujo a China a advertirle a Washington que está "jugando con fuego".
Estados Unidos respondió diciendo que no hay razones para que China "reaccione de forma exagerada".
En su travesía hacia América Central la gobernante taiwanesa hizo una escala en Nueva York. Aunque Estados Unidos reconoció a Pekín en 1979, es el principal aliado de Taipéi y su mayor proveedor de armas.
China considera a la isla de gobierno democrático y autónomo como una provincia rebelde que es parte de su territorio, a la que espera recuperar un día incluso sin descartar la fuerza.