Pompeo llega por sorpresa a Afganistán antes de las negociaciones con los talibanes
El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, viajó hoy por sorpresa a Afganistán para reunirse con el presidente del país, Ashraf Ghani, días antes del comienzo de la séptima ronda de negociaciones entre Estados Unidos y los talibanes.
Pompeo se reunió con Ghani y "ambas partes abordaron los comicios, el proceso de paz, la asistencia a las fuerzas de seguridad afganas y las relaciones bilaterales", informó el Palacio Presidencial afgano en un comunicado de prensa.
"Estados Unidos apoya el proceso de paz y las inminentes elecciones presidenciales y está dispuesto a cooperar en este sentido", afirmó el secretario de Estado. De acuerdo con el comunicado, Pompeo señaló que "las fuerzas de seguridad afganas han mostrado sus buenas habilidades en la lucha en los últimos meses".
Ghani llamó a sus aliados internacionales a "evitar esfuerzos divididos y unilaterales" en el proceso de paz con los talibanes.
La visita de Pompeo llega días antes de que una delegación estadounidense se reúna con los talibanes en Catar el sábado para la séptima ronda de negociaciones de paz entre ambas partes.
Desde el inicio de las conversaciones, los insurgentes han insistido en que no se reunirán con representantes del Gobierno afgano ni sostendrán conversaciones sobre otros temas, incluido el alto el fuego, hasta que lleguen a un acuerdo sobre la retirada de las tropas extranjeras.
Ambas partes buscan una salida a casi dos décadas de conflicto armado en la nación asiática, aunque hasta ahora los talibanes se han negado a sentarse en la mesa con el Gobierno afgano.
Hace una semana, el portavoz talibán Suhail Shaheen afirmó en Twitter que los estadounidenses habían aceptado la retirada de sus efectivos.
El enviado especial de Estados Unidos para la paz en Afganistán, Zalmai Khalilzad, desmintió la declaración insurgente ese mismo día.
El Gobierno afgano controla alrededor del 55 % del territorio de Afganistán y los talibanes dominan en torno al 11 %, mientras que el resto del territorio está en disputa, según datos del inspector especial general para la Reconstrucción de Afganistán (SIGAR), del Congreso de Estados Unidos.