Perú desciende al segundo lugar mundial en cultivo de coca
Perú descendió al segundo lugar en el cultivo mundial de coca mientras Colombia se consolidó como el primer productor con 69.000 hectáreas de cocales, según datos comparados de 2014 elaborados por la Oficina de las Naciones Unidas contra las Drogas y el Delito.
"En Perú en 2014 se registra una extensión de 42.900 hectáreas... esta es la extensión más baja desde 1998", dijo el miércoles Flavio Mirella, representante de la Oficina en Perú, durante la presentación del informe sobre los monitoreos anuales de cultivos de coca.
Dos semanas atrás la Oficina había presentado en Bogotá el informe para Colombia, que aumentó de 48.000 hectáreas en 2013 a 69.000 el año pasado. Perú fue el primer cultivador global de coca en 2013.
"Somos el país de la región andina que más ha avanzado en la disminución de hoja de coca", afirmó el jefe antidrogas de Perú Alberto Otárola. "No nos alegra, por supuesto, el incremento de cultivos de hoja de coca en Colombia", agregó.
Pese a la reducción en Perú, el informe mostró que no hubo erradicación en la más extensa zona de cocales que es el Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro cuya extensión es del tamaño de Bélgica e Israel en conjunto y representa 68% del cultivo nacional.
El informe indicó que en todo Perú se produjeron 100.840 toneladas de hoja de coca de las cuales 91% fue al narcotráfico, en especial del Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro donde se realizan hasta cinco cosechas por año y se producen 3,5 toneladas por hectárea.
Otárola no precisó si la gestión del presidente Ollanta Humala hará erradicaciones en el mencionado valle, donde el gobierno tenía proyectado destruir 5.000 hectáreas de cocales en los últimos 12 meses. Los agricultores de esas zonas dijeron recientemente a The Associated Press que si el gobierno intenta destruir sus cocales los defenderán con sus vidas.
Añadió que en lo que resta del año se entregarán "equipos de alta tecnología" a 15 comisarías de policía ubicadas dentro del valle para intensificar las acciones de decomiso de drogas.
El informe también mostró que, comparado con 2013, el precio de un kilo de hoja de coca vendida al narcotráfico se mantuvo en 4,3 dólares, mientras que el kilo de pasta base bajó levemente hasta 843 dólares y el de clorhidrato de cocaína descendió a 1.178 dólares.
Perú anunció que la meta de erradicación de cocales para 2015 es de 35.000 hectáreas y que la asignación del gobierno en recursos para la lucha contra las drogas desde 2011 acumula 295 millones de dólares.