Sindicato del automóvil de EEUU anuncia acuerdo preliminar con Ford
El sindicato estadounidense del automóvil anunció el miércoles un acuerdo preliminar con Ford tras un paro de 41 días de los "Tres Grandes" fabricantes de Detroit.
El acuerdo, que los trabajadores aún deben aprobar en una votación, incluye un aumento salarial del 25% por hora, dijo el sindicato United Auto Workers (UAW).
El incremento es algo menor al 40% solicitado por el presidente de la UAW, Shawn Fain, cuando la UAW inició la huelga el 15 de septiembre, en el primer paro simultáneo de las Tres Grandes de Detroit (Ford, General Motors y Stellantis).
Sin embargo, está muy por encima del 9% que Ford propuso inicialmente en agosto.
"Este acuerdo nos sitúa en un nuevo camino para hacer las cosas bien en Ford, en las Tres Grandes y en toda la industria automovilística", dijo Fain.
Otros elementos clave son los ajustes garantizados por el costo de vida, la eliminación de los distintos niveles salariales que perjudican a los empleados de menor antigüedad y el derecho de huelga en caso de cierre de plantas.
"Vamos a dejar que el proceso democrático siga su curso", dijo Fain, calificando a las bases de "máxima autoridad".
Ford confirmó el acuerdo, al afirmar que "nos complace haber alcanzado un acuerdo provisional sobre un nuevo contrato laboral con la UAW que cubre nuestras operaciones en Estados Unidos".
Momentos después, el presidente Joe Biden saludó el "histórico" acuerdo.
"Felicito a la UAW y a Ford por haberse reunido tras una ardua negociación de buena fe y haber alcanzado esta noche un histórico acuerdo provisorio", dijo el mandatario en un comunicado.
Ampliación de la huelga
Aunque la protesta inicial de la UAW afectó a tres plantas y sólo 12.700 trabajadores se declararon en huelga, el sindicato ha ido ampliando gradualmente la acción en las semanas siguientes en busca de un mejor acuerdo.
Más de 45.000 trabajadores estaban en huelga antes del acuerdo con Ford.
La UAW cuenta con unos 146.000 trabajadores del sector del automóvil en Estados Unidos.
En los dos últimos días, la UAW escaló la huelga tanto en Stellantis como en GM, lo que paralizó fábricas clave en Michigan y Texas que producen algunos de los vehículos más rentables de estas empresas.
Tanto GM como Stellantis ofrecen actualmente aumentos salariales del 23%. Fain ha argumentado que las empresas necesitan endulzar aún más el acuerdo a la luz de las concesiones sindicales tras las reorganizaciones por quiebra de hace más de una década.
Tras un acuerdo provisional, los sindicatos a veces no ponen fin a una huelga hasta que el acuerdo es ratificado por los afiliados.
Pero en un giro, la UAW dijo que los trabajadores de Ford volverían a sus turnos para presionar a GM y Stellantis.
"Se trata de un movimiento estratégico para conseguir el mejor acuerdo posible", dijo el vicepresidente de la UAW, Chuck Browning.
Añadió que "lo último" que quieren GM y Stellantis es que Ford vuelva a funcionar a pleno rendimiento mientras ellos se dedican a perder el tiempo y a quedarse atrás.