Fiscalía de Estados Unidos acepta rebajar multa a Odebrecht por trama de sobornos
La constructora brasileña Odebrecht en diciembre del 2016 fue sentada en el banquillo de los acusados en un Juzgado de Nueva York, Estados Unidos por crear un engranaje de corrupción que salpico a Brasil y al menos 12 países, entre los que se encuentra Panamá.
En ese momento la constructora brasileña llegó a un acuerdo con la fiscalía de pagar 4,500 millones de dólares que se repartirían entre los países afectados (Estados Unidos, Brasil y Suiza), sin embargo posteriormente Odebrecht retrocedió y dijeron que solo tenían capacidad financiera para pagar 2,600 millones de dólares. Lo cual fue aceptado y sometido a validación por parte del Fiscalía neoyorquina.
De acuerdo a una publicación del diario español El País, la fiscalía norteamericana aceptó la petición de la empresa brasileña de que pague la mitad de la suma planteada en diciembre de 2016.
“Se estableció un mecanismo para comprobar si era verdad. Cuatro meses después, las autoridades estadounidenses y brasileñas le han dado la razón a Odebrecht (…) En un documento, fechado el pasado martes, el Departamento de Justicia comunica al magistrado federal Raymond J. Dearie su propuesta apropiada de condena a Odebrecht de cara a la vista del próximo lunes 17: una multa de 2.600 millones de dólares”, destaca la información publicada por el rotativo español en su versión digital.
La compañía de capital brasileño también ha aceptado la creación de un supervisor contable independiente durante tres años, además ha cooperado con el gobierno de Estados Unidos y se ha comprometido a establecer diversas medidas anticorrupción en sus procesos internos.
El grupo Odebrecht, implicado en la gigantesca trama de corrupción destapada en Petrobras, pagó 3,370 millones dólares en sobornos entre 2006 y 2014, según desveló en una declaración a la Justicia divulgada hoy y que fue dada a conocer por el exdirectivo Hilberto Mascarenhas.
La cifra aparece en una tabla entregada por Mascarenhas a los fiscales de la operación Lava Jato, que desde hace más de tres años investigan los millonarios desvíos que se dieron en el seno de la petrolera estatal.
Odebrecht, la mayor constructora de Brasil, dedicó 1,460 millones de dólares en sobornos solo entre 2012 y 2013, mientras que en 2014, año en el que la Policía desveló la red de corruptelas, bajó a 450 millones de dólares.
Mascarenhas, encargado del conocido como Departamento de Operaciones Estructuradas, desde donde se distribuían y registraban todas las coimas, reveló en su testimonio que llegó a alertar al expresidente de la compañía, Marcelo Odebrecht, del preocupante aumento de la partida destinada para ese fin ilícito.