Estados Unidos dice que Siria usa 'crematorio' para ocultar matanzas
El gobierno de Estados Unidos acusó este lunes 15 de mayo a las autoridades de Siria de instalar un crematorio en una prisión militar para destruir los restos de miles de prisioneros ejecutados, y exhortó a Rusia a presionar a su aliado Damasco a cesar las matanzas.
En apoyo de esta denuncia, un alto funcionario del Departamento de Estado exhibió a la prensa fotos de satélite recientemente "desclasificadas" que muestran el complejo carcelario de Saydnaya, al norte de Damasco.
En esas fotos se pueden ver los techos de los diferentes edificios del complejo con anotaciones como "prisión principal" y "probable crematorio".
Stuart Jones, subsecretario interino del Departamento de Estado para Oriente Próximo, señaló que "a partir de 2013 el régimen sirio modificó un edificio en el complejo de Saydnaya para lo que creemos es un crematorio".
"Aunque las muchas atrocidades del régimen están bien documentadas, creemos que la construcción de un crematorio es un esfuerzo por encubrir la extensión de las matanzas que ocurren en Saydnaya", expresó el funcionario.
Nieve derretida
En una de las fotos uno de los edificios contiene la mención "nieve derretida sobre una parte del techo", detalle que según el funcionario indicaría la existencia de "un crematorio instalado por el régimen".
Jones dijo que la información llegó a conocimiento de Washington a través de agencias humanitarias creíbles así como de la "comunidad estadounidense de inteligencia". Dijo que hasta 50 personas son ahorcadas por día en esa prisión.
El funcionario no ofreció un estimado oficial del número de víctimas, pero mencionó un estudio de Amnistía Internacional donde se afirma que entre 5,000 y 11,000 murieron en la prisión entre 2011 y 2015.
En ese mismo período, alegó Jones, el gobierno de Bashar al Asad habría detenido entre 65,000 y 117,000 personas.
El informe de Amnistía Internacional donde constan esos números, sin embargo, no hace ninguna mención a un crematorio en las instalaciones.
En Beirut, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó a AFP que "no poseemos información de que haya un crematorio. Sabemos que el número de personas ejecutadas allí es elevado".
Esta acusación sobre la existencia del eventual crematorio ocurre pocos días después de la visita del canciller ruso, Sergei Lavrov, a Washington, donde mantuvo encuentros con el presidente Donald Trump y el Secretario de Estado, Rex Tillerson.
"El secretario Tillerson ha sido firme y claro con el ministro Lavrov: Rusia tiene una enorme influencia sobre Asad", dijo por su parte Heather Nauert, portavoz del Departamento de Estado.
Jones, en tanto, fue más directo y señaló que las matanzas en Siria "ocurren, aparentemente, con el apoyo incondicional de Rusia y de Irán".