Diplomacia mexicana aguarda respuesta de Clinton para programar viaje a México
La diplomacia mexicana en Estados Unidos sigue esperando que la candidata presidencial demócrata, Hillary Clinton, responda a la invitación cursada por la Presidencia de México para conversar sobre la relación bilateral y a la que sí contestó el candidato republicano, Donald Trump.
"Las invitaciones se corrieron al mismo tiempo, hubo una respuesta inmediata de uno de los candidatos y estamos esperando que haya una respuesta de la candidata Clinton también", dijo el embajador de México en EEUU, Carlos Sada, a un reducido grupo de periodistas entre los que estaba Efe.
En todo caso, el embajador aseguró que "está abierta la invitación y son cuestiones de agendas".
Por su parte, un responsable de la campaña de Clinton aseguró hoy que la exsecretaria de Estado ha recibido la invitación de Peña Nieto, con quien se reunió por última vez en México en 2014.
"Nuestra campaña tiene comunicación continúa con representantes del Gobierno mexicano. Hillary espera poder hablar con el presidente Peña Nieto de nuevo en el momento adecuado", destacó el responsable de la campaña de Clinton que pidió el anonimato.
Trump se reunió este miércoles en México con Peña Nieto y horas después pronunció un discurso en Arizona (EEUU) en el que retomó la línea dura contra la inmigración que le aupó en las primarias republicanas e insistió en que alzará un muro pagado por el Gobierno mexicano e impulsará las deportaciones masivas de indocumentados.
En ciudad de México, en una rueda de prensa conjunta, Trump dijo tener "un gran respeto" por los "mexicano-estadounidenses" mientras que Peña Nieto hizo ver al republicano que hubo "malinterpretaciones o afirmaciones que lamentablemente habían lastimado y afectado a los mexicanos".
Hoy, por su parte, el embajador de México destacó "el razonamiento del presidente" Peña Nieto y coincidió en que "era importante que (Trump) conociera de viva voz cuál es la situación de México" y cómo deben abordarse desde la perspectiva mexicana temas como la inmigración, la competitividad y los acuerdos comerciales.
La perspectiva de Trump para abordar estas cuestiones se basa en la deportación de los 11 millones de indocumentados que se calcula que viven en el país, la construcción de un muro en la frontera que comparten México y EEUU y el rechazo al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN, o NAFTA en inglés).