Demócratas van a primaria de New Hampshire con Sanders como favorito
Los demócratas votan este martes en New Hampshire, con el senador de izquierda Bernie Sanders como favorito y desafiado por el joven exalcalde gay Pete Buttigieg, en la segunda etapa de la carrera designar al rival de Donald Trump en las elecciones de noviembre.
Las urnas abrieron temprano en este estado del noreste de Estados Unidos con apenas 1,3 millones de habitantes, que tiene un peso importante en las elecciones y que podría reducir el número de aspirantes a la nominación demócrata.
Sanders, de 78 años, quien se autodefine como socialista, llega primero en las encuestas previas a la primaria de New Hampshire, tras los caóticos "caucus" de Iowa la semana pasada en los que Buttigieg se impuso por un estrecho margen.
Detrás se sitúan los otros candidatos que tienen esperanzas dar la sorpresa o al menos evitar un naufragio, por lo cual han estado buscando votos en las pequeñas ciudades del estado, en granjas agrícolas, pueblos y aldeas de montaña cubiertas de nieve.
Pistoletazo de salida
La localidad de Dixville Notch, de cinco habitantes, tradicionalmente es la primera en votar un minuto después de la medianoche. "Tenemos cierto orgullo de estar aquí", dijo Tom Tillotson, encargado de la votación.
"Nos tomamos esto con seriedad", dijo a la AFP. "Nos sentimos honrados de ser... básicamente el pistoletazo de salida para el proceso electoral primario".
Sorpresivamente, el millonario Michael Bloomberg ganó en esta localidad con un voto republicano y dos demócratas. Buttigieg y Sanders obtuvieron un voto cada uno.
En el centro de votación instalado en un gimnasio de de una escuela de Manchester, que abrió temprano en la mañana, decenas de personas depositaban sus papeletas en urnas ubicadas detrás de cortinas de plástico azules y rojas, adornadas con una imagen de la estatua de la Libertad.
Buttigieg, de camisa, corbata y un abrigado saco negro salió temprano a saludar a los votantes, con quienes se tomó selfies con un marco de paisajes nevados.
El exvicepresidente Joe Biden urgió a la gente a salir a votar. "Hoy es el día", tuiteó a primera hora de la mañana.
Nuevas posiciones
De hecho, el desempeño de Biden va a ser examinado con lupa, quien tras encabezar al intención de voto a nivel nacional bajó por primera vez el lunes al segundo lugar, detrás de Sanders, según una encuesta de la Universidad de Quinnipiac. Bloomberg quedó tercero.
En el promedio de encuestas en New Hampshire, Biden llega cuarto junto a la senadora progresista Elizabeth Warren, por detrás de la senadora moderada Amy Klobuchar.
El exvicepresidente de Barack Obama prometió no abandonar la carrera sin importar lo que pase este martes, en una declaración que parecía admitir un revés, pues confía en un buen desempeño en Nevada la próxima semana y en Carolina del Sur el 29.
Los independientes, que superan tanto a republicanos como a demócratas en New Hampshire, pueden votar en cualquiera de las dos primarias, y el comicio terminar en un final de bandera verde.
La interna demócrata comenzó a agriarse en las últimas semanas, bajo la mirada atenta de Trump, que disfruta burlándose de sus rivales.
El mandatario, que aspira a un segundo mandato en las elecciones del 3 de noviembre, viajó en la noche del lunes a New Hampshire buscando acaparar la atención con un gran acto público en Manchester.
"Recuerden esto: los demócratas de Washington nunca han sido tan extremistas", lanzó a una entusiasta multitud.
"Estamos salvando su sistema de salud mientras los demócratas socialistas intentan quitarles su sistema de salud", agregó en un claro dardo contra Sanders.
Revolución o realismo
En momentos en que la carrera demócrata comienza a decantarse, Sanders defiende su "revolución" política contra la desigualdad. "Lo que pase aquí va a tener enormes consecuencias", dijo a sus simpatizantes en New Hampshire.
Y criticó a sus rivales más moderados fustigando que acepten donaciones de millonarios, a diferencia de su campaña, que bate récords de recaudación gracias a pequeños aportes individuales.
Al contrario, Buttigieg, exalcalde de South Bend de 38 años, defiende una política que califica como "realista" y a menudo se dirige a los votantes republicanos durante los debates.
Este veterano de la Guerra de Afganistán, es también el primer candidato abiertamente homosexual con posibilidades de llegar a la Casa Blanca.
Mientras Sanders aboga por una reforma profunda del sistema de salud en un país industrializado donde millones de personas no tienen seguro, Buttigieg critica los costos de este plan y afirma que su rival no sabe cómo financiarlo.
Y en su lucha por mantenerse vigente, Biden ataca el flanco más débil de Buttigieg: su falta de experiencia política a nivel nacional, un mensaje que hace eco en muchos electores.
Tras asistir el domingo a un mitin en Nashua, New Hampshire, Katie Morgan, de 20 años, dijo a la AFP que Buttigieg le parecía un candidato "interesante", pero que personalmente prefería a alguien con "un poquito más de experiencia".