Comisión de la Verdad sobre Ayotzinapa no será vinculante, dice futura ministra
La Comisión de la Verdad sobre el caso Ayotzinapa no será vinculante ni partidista y seguirá todas las líneas de investigación, afirmó hoy la futura ministra mexicana de Gobernación, Olga Sánchez Cordero.
En declaraciones a Radio Fórmula, Sánchez Cordero explicó que la Comisión de la Verdad no tendrá carácter vinculante, sino que será parte "de una respuesta del Estado" para dilucidar la verdad en la desaparición de los 43 estudiantes de la escuela de Ayotzinapa ocurrida el 26 de septiembre de 2014.
Este miércoles, el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, alcanzó tres compromisos con los padres de los alumnos de Ayotzinapa, entre ellos la creación de una Comisión de la Verdad, independientemente de las resoluciones judiciales sobre ese órgano.
Sobre esta comisión, decretada por un tribunal colegiado, la próxima ministra explicó que estará adscrita a la Secretaría de Gobernación (Segob) y que no es una "institución formal" como la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía).
"En su naturaleza, una comisión es totalmente diferente. Estará integrada por expertos y por víctimas, y seguramente, porque así lo indicó el presidente electo" por miembros de organismos internacionales, agregó.
La secretaria indicó que esta Comisión de la Verdad, que se creará a partir del 1 de diciembre cuando López Obrador asuma la Presidencia, permitirá dar una "investigación paralela" a la que llevará a cabo la PGR, y que terminará con la elaboración de un reporte que será "muy útil" para las instancias de justicia.
De acuerdo con la versión oficial esgrimida por el gobierno de Enrique Peña Nieto, los estudiantes fueron detenidos el 26 de septiembre de 2014 en el municipio de Iguala por policías corruptos, que los entregaron a miembros de un grupo criminal que los asesinaron y quemaron en un vertedero.
No obstante, este relato ha sido desmentido por expertos internacionales, que han señalado irregularidades en la investigación oficial, así como la imposibilidad física de que 43 cuerpos fueran incinerados en el basurero.