Biden se vuelca en la campaña electoral para salvar a los demócratas
Washington, Estados Unidos/Joe Biden seguía este jueves intentando evitar que dentro de cinco días el Congreso caiga en manos de los republicanos en las elecciones de medio mandato en Estados Unidos.
El presidente demócrata partió a Nuevo México y California, tierras del oeste donde su partido suele cosechar éxitos. Luego viajará a Pensilvania (noreste), un estado donde el voto es más reñido, y a Chicago, otro bastión demócrata.
Su predecesor republicano Donald Trump va este jueves a Iowa, un estado rural del Medio Oeste, que al contrario se inclina más por los republicanos.
Con vistas a los comicios del 8 de noviembre, que corren el riesgo de paralizar políticamente su mandato, Joe Biden ha optado por presentarse como el defensor de las clases trabajadoras y garante de la democracia.
En una universidad pública de Nuevo México recordará que ha condonado parcialmente las deudas contraídas por millones de estudiantes para pagar sus estudios.
Biden quiere destacar "las desastrosas consecuencias para la clase media estadounidense si los republicanos siguen adelante con su plan de privar a millones de personas del alivio de la deuda, mientras regalan 3 billones de dólares a los gigantes farmacéuticos, a las multinacionales y a los ultrarricos", afirmó la Casa Blanca, resumiendo a su manera los proyectos económicos de los conservadores.
El presidente demócrata de 79 años sabe que se juega mucho en estos comicios en los que se renueva toda la Cámara de Representantes, más de un tercio del Senado, así como varias gobernaciones y cargos locales. Y el miércoles por la noche pronunció un discurso sobre la democracia con tintes dramáticos.
Teme que no solo cambien el equilibrio de fuerzas en el Congreso, sino que aúpen al poder a gobernadores y ediles afines a Trump.
- "Caos"-
Estimó que negando el resultado de las últimas elecciones presidenciales y amenazando con contestar las de la próxima semana los republicanos más radicales que defienden a Trump podrían sumir a la primera potencia mundial en el "caos".
En el pequeño estado de Rhode Island, el último clip de la campaña demócrata, por ejemplo, utiliza imágenes del asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021 por parte de partidarios de Donald Trump.
Está por ver si la movilización de Biden y de otras personalidades, como el expresidente Barack Obama, surtirá efecto. Por ahora los sondeos son más bien favorables a los republicanos.
Los conservadores no solo esperan obtener el control de la Cámara de Representantes, como prevén las encuestas, sino que también sueñan con conseguir el del Senado, para el que las predicciones son menos claras.
El Partido Republicano centra el discurso en los altos precios y el aumento de la delincuencia, que atribuye a la política de Biden. Intenta no incidir en su oposición al derecho al aborto, desprotegido desde una sentencia de la Corte Suprema.
Los demócratas, por el contrario, defienden la interrupción voluntaria del embarazo y quieren protegerla con una ley federal si ganan las elecciones.
Estos comicios en cierto modo se han convertido en una confrontación indirecta entre Donald Trump y Joe Biden, antes de las elecciones presidenciales de 2014.
Biden ha dicho que tiene la intención de presentarse a la reelección pero no cuenta con el apoyo de todo el partido debido a su edad (pronto cumplirá 80 años) y a su impopularidad. Una derrota la próxima semana lo dejará todavía más en el aire.
Trump eligió por su parte Iowa, que no es un estado estratégico para las elecciones intermedias, pero es donde comienza tradicionalmente la campaña para la nominación de los candidatos a la Casa Blanca.