En Rafah, la muerte viene del cielo antes de una probable invasión terrestre israelí
Nueve personas de una misma familia, entre ellas varios niños, murieron la madrugada del sábado en un bombardeo israelí de Rafah, antes de una anunciada invasión terrestre de esa localidad del sur de Gaza, último refugio de más de un millón de palestinos desplazados por la guerra.
Antes del inicio del conflicto entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás el 7 de octubre, Rafah, en la cerrada frontera con Egipto, tenía 250.000 habitantes. Actualmente, según la ONU, acoge a 1,5 millones, un millón de ellos en tiendas de campaña o en las cercanías de refugios instalados por oenegés.
Una situación que no impide que Israel la siga bombardeando, como al resto del territorio, y preparando una ofensiva terrestre, pese a las presiones de sus mejores aliados para que se abstenga de hacerlo por el riesgo de un desastre humanitario. Pero el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, está decdido a dar la orden de asalto, alegando que allí se concentran cuatro batallones de Hamás.
La familia Radwan murió mientras dormía. Entre los muertos hay seis niños o menores, de 1 a 16 años, dos mujeres y un hombre, indicó el hospital Al Najjar, donde los cuerpos fueron trasladados.
"Nueve mártires, incluido seis niños, fueron sacados de los escombros" de su casa en el barrio de Tal al Sultan, declaró el portavoz de la Defensa Civil de Gaza, Mahmud Bassal, en un comunicado.
Familiares de los difuntos lloraban frente al recinto hospitalario, junto a pequeñas bolsas mortuorias de plástico blanco, indicó un periodista de la AFP, que también vio a una mujer acariciando la frente de un niño muerto.
"La gente dormía tranquilamente", contó un vecino, Abu Mohammed Ziyadah. "Como puede ver, no había combatientes, ni siquiera hombres adultos, salvo el jefe de familia. Solo había mujeres y niños", dijo a la AFP.
Cerca de ahí, Wisam al Arja vio llegar su última hora: un agente israelí le llamó para avisarle que tenía 15 minutos para abandonar su casa, ya que el ejército iba a bombardearla. Una hora después de esta llamada, una bomba cayó sobre el edificio.
Con sus familiares, removió el sábado los escombros para tratar de recuperar algunas pertenencias: un abrigo lleno de polvo, unas cobijas, una taza y una olla.
Calles cerradas
Poco después del inicio de la guerra en Gaza, Israel ordenó a los palestinos del norte del territorio que se desplazaran hacia las "zonas de seguridad" del sur, como en Rafah.
El portavoz de la Defensa Civil de Gaza, subrayó que varias zonas de Rafah sufrieron bombardeos anoche, incluido el barrio de Salam donde una persona murió y varias resultaron heridas.
El ejército israelí también bombardeó una casa y una guardería, indicó.
La ofensiva israelí ya dejó 34.049 muertos en Gaza, según el último balance del Ministerio de Salud del territorio, gobernado por Hamás desde 2007.
La guerra empezó tras el ataque de Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre, en el que los combatientes islamistas mataron a unas 1.170 personas y secuestraron a 250, según un cómputo de la AFP con base en datos oficiales israelíes.
Medios israelíes afirmaron el sábado que 250.000 personas habían abandonado recientemente Rafah en dirección al norte, tras la retirada de la mayoría de tropas israelíes de esa zona.
Contactado por la AFP, El Cogat, el organismo del Ministerio de Defensa israelí encargado de los asuntos civiles palestinos, no comentó estas cifras.
"Es falso", reaccionó un portavoz del gobierno de Hamás. "Los desplazados no regresaron a sus hogares porque la ocupación [israelí] cerró las carreteras" que unen el sur y el norte de Gaza, declaró Mael al Thawabta.