La ONU pide "revitalizar" la tregua en Siria
La Comisión de investigación de la ONU sobre la situación de los derechos humanos en Siria pidió este martes "revitalizar" la tregua que entró en vigor en febrero y levantar los asedios impuestos a casi 600.000 personas.
Este llamado se produce mientras, en el frente diplomático, Washington y Moscú -que negociaron la tregua de febrero- parecen incapaces de ponerse de acuerdo sobre la manera de reducir la violencia en el país, donde la guerra ha provocado desde 2011 más de 290.000 muertos.
"El acuerdo de cese de hostilidades que entró en vigor el 27 de febrero supuso una luz de esperanza a los que buscan una solución pacífica al conflicto", dicen los investigadores en su informe.
"En las semanas posteriores al acuerdo, hubo una desescalada de la violencia armada en gran parte del país", prosiguen.
Pero la comisión lamenta el "claro recrudecimiento" de combates y ataques contra civiles a partir de fines de marzo, y reseña que los grupos rebeldes han perdido terreno frente a las fuerzas gubernamentales.
Así, ahora "recomienda a todas las partes que restaure y revitalice el cese de hostilidades" y se "ponga fin a los ataques indiscriminados contra la población civil".
"Durante los seis últimos meses, hubo un fuerte aumento de los ataques contra personal de sanidad y centros médicos" y "la mayoría de estos ataques fueron llevados a cabo por las fuerzas progubernamentales", añade.
Los investigadores exhortan a las partes a poner fin a los asedios que padecen unas 600.000 personas en Siria y a facilitar la ayuda humanitaria.
En este aspecto, expresan su inquietud por la suerte de "al menos 300.000 civiles" que viven en la parte este de la ciudad de Alepo, que incluye barrios rebeldes que están totalmente asediados desde el lunes por las tropas del gobierno.
Además, la Comisión sigue investigando la alegada utilización de armas químicas, tras haber recibido "informaciones creíbles" sobre el uso de gas cloro el 5 de abril en un bombardeo del barrio Sheij Maqsud en Alepo.