Más de 150 cohetes disparados contra Israel tras la muerte de un responsable de Hezbolá en Líbano
Algunos proyectiles fueron interceptados, pero otros alcanzaron el norte de Israel y provocaron incendios en varios lugares. "La mayoría cayeron en terreno descampado y algunos en localidades del norte de Israel", declaró el ejército.
Alrededor de 160 proyectiles fueron disparados desde Líbano contra el norte de Israel este miércoles, anunció el ejército israelí, al día siguiente de la muerte de un alto cargo del movimiento proiraní Hezbolá en ese país.
Hezbolá anunció en cuatro comunicados haber disparado "varios misiles Katiusha" contra tres bases militares israelíes, y afirmó haber alcanzado "una fábrica militar" con misiles guiados "en represalia por el asesinato" del comandante Taleb Sami Abdallah, alias Abu Taleb, alto cargo del movimiento chiita libanés.
Según el ejército israelí, unos 160 proyectiles fueron lanzados desde Líbano sobre territorio israelí este miércoles de mañana, en dos tandas y sin causar víctimas según las primeras informaciones.
Algunos proyectiles fueron interceptados, pero otros alcanzaron el norte de Israel y provocaron incendios en varios lugares. "La mayoría cayeron en terreno descampado y algunos en localidades del norte de Israel", declaró el ejército.
Taleb Sami Abdallah murió con otros tres combatientes de Hezbolá en un ataque israelí que apuntó el martes a una casa en la que se encontraban en el pueblo de Juaiyya, en el sur de Líbano, según una fuente cercana al movimiento proiraní.
Contactado por AFP, un portavoz del ejército israelí dijo que no podía confirmar si Israel efectuó el ataque que mató a este responsable militar de Hezbolá.
Una fuente militar libanesa declaró que el comandante Abu Taleb es la figura "más importante de Hezbolá asesinada" desde que el movimiento chiita abrió un frente con Israel el 8 de octubre, al día siguiente de iniciarse el conflicto en Gaza entre Hamás y el Estado hebreo.
Al menos 467 personas han muerto en Líbano tras más de ocho meses de ataques transfronterizos, la mayoría combatientes, pero también casi 90 civiles según estimaciones de la AFP.
Del lado israelí, al menos 15 soldados y 11 civiles murieron, según las autoridades. A ambos lados de la frontera, decenas de miles de personas tuvieron que abandonar sus hogares por las hostilidades continuas.